Entre noviembre de 2023 y abril de 2024, más de 137.000 asalariados formales perdieron su puesto de trabajo como consecuencia de la recesión. Asimismo, los salarios reales no logran recuperar la pérdida por la devaluación de fin del año pasado, pese a leve mejora en abril.
Según datos que surgen del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), casi 112.000 de esas personas que se quedaron sin su fuente de ingresos trabajaban en el sector privado, mientras que otras 25.000 estaban registradas en el Estado.
También se verificaron caídas en el empleo de trabajadoras de casas particulares y trabajadores independientes con monotributo social. Por el contrario, solo se vieron incrementos en los segmentos de monotributistas y autónomos. Estos números reflejan el deterioro del mercado de trabajo argentino, que ahora no solo muestra un crecimiento de la informalidad sino también un mayor desempleo y una desprotección hacia los sectores vulnerables.
En cuanto al registro de abril, se verificaron casi 13.000 puestos de trabajo menos entre los asalariados del sector privado, y 3.200 empleos menos en el sector público.
El desempleo volvió a los niveles de la pandemia
Según el Indec, el desempleo trepó al 7,7%, la cifra más elevada desde 2021, cuando la economía todavía acusaba los efectos de la pandemia de Covid-19.
Entre enero y marzo la cantidad de desocupados llegó a 1.731.000. Es decir, 180.000 personas más en relación a esos mismos meses en 2023.
El director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), Hernán Letcher, anticipó que los números van a seguir empeorando, si se tiene en cuenta que la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) de la Secretaría de Trabajo anticipa una pérdida de al menos 20.000 puestos formales para mayo.
“Visité muchas empresas en el último tiempo. Es una olla a presión; hay un montón de pymes que adelantaron vacaciones, suspendieron personal, recortaron horas extra, todos mecanismos previos a la ruptura de la relación laboral”, dijo.
Los salarios reales en sector privado cayeron casi un 5% desde noviembre
Las estadísticas del SIPA indicaron que los salarios reales de los asalariados formales del sector privado mejoraron 5,2% en abril. Aun así, desde noviembre acumulan una contracción del 4,7%.
Se trata del segmento de trabajadores más estable de la economía argentina en este contexto. Los sueldos de los empleados públicos y de los trabajadores informales (para los cuales el SIPA no da información) atraviesan una peor situación.
Las corporaciones sí ganaron
En un clima de recesión económica, algunas grandes empresas y grupos económicos lograr una alta rentabilidad histórica, según un informe del Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (Cifra), dependiente de la CTA-T.
Ese centro presentó un informe en el que analizan los balances empresarios de 23 empresas de diversos sectores. Los datos muestran que Aeropuertos Argentina, propiedad del grupo Eurnekian, y Metrogas, que es una asociación entre YPF y la norteamericana Integra Gas, elevaron su facturación en el primer trimestre de 2024.
Las ganancias de Aeropuertos Argentina se dispararon 80,1%. Esta es una cifra récord porque los rendimientos anuales del 2023 mostraron sólo 2,2%. Aunque los mejores registros que tuvo en los últimos años fue en 2022 con un 36,3% cuando se flexibilizó la circulación después de la pandemia sanita. Por otra parte, Metrogas, luego de tener un casi nulo crecimiento en el primer trimestre de 2023, elevó la cifra a un 74,3% en lo que va del año.