Avanza la causa de la “Gestapo Antisindical”, la mesa judicial bonaerense que involucra al exgobierno de María Eugenia Vidal, sus exfuncionarios y empresarios de la construcción que persiguió dirigentes gremiales con el armado de causas judiciales con la colaboración de jueces, fiscales y la Procuración General. En este marco, en las últimas horas, trascendió que el titular de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) nacional, Gerardo Martínez, estaría involucrado en la detención de Juan Pablo “Pata” Medina, del gremio de La Plata.
Así lo reveló Diario Hoy que, según un testigo, un periodista que se encontraba investigando la causa, declaró que Gerardo Martínez “le entregó al ‘Pata’ Medina a Vidal para posteriormente encarcelarlo”. “Opté por tomar al Pata Medina como caso testigo, para contar una operatoria más amplia”, comenzó el declarante que, al continuar con la investigación, finalizó con la ya conocida reunión en la sede del Banco Provincia entre empresarios, funcionarios y agentes de la AFI.
Respecto a la relación de Vidal y Gerardo Martínez, aseguró que “el interés de la gobernadora era la de conseguir el beneplácito del dirigente para encarcelar a Juan Pablo Medina”. “El primer dato que yo tenía, era esta investigación desarrollada por Emilia Delfino, que yo dirigí como editor, en la cual alude al interés de la entonces gobernadora Vidal por obtener el beneplácito de Gerardo Martínez”. El testigo confesó que en ese momento fue víctima de espionaje ilegal, lo que motivó a Hugo Alconada Mon a continuar la investigación sobre la reunión.
“En total habré mantenido unas 20 conversaciones, de las cuales surge que, en un viaje oficial a Holanda que hizo el entonces presidente Mauricio Macri en marzo de 2017, en el cual Gerardo Martínez, titular de la UOCRA Nacional, integró la comitiva oficial, ambos habían mantenido una conversación sobre el Pata Medina y su accionar en La Plata. Si bien Martínez negó cuando lo llamé que hayan hablado sobre Medina en ese viaje, hay un artículo publicado en el diario Los Andes, de Mendoza, en el cual Martínez afirma todo lo contrario, es decir que dice que habló con Macri acerca de Medina”, afirma.
Lo cierto es que al consultarle sobre un párrafo del libro “La raíz, de Alconada Mon, donde se menciona que Gerardo Martínez sería cómplice de Vidal en la encarcelación de Medina, explica: “Lo ratifico. El comentario sobre cómo Gerardo le entrega a Medina en bandeja a Vidal, se apoya en aquel trabajo previo de investigación desarrollado por Delfino (periodista de Chequeado.com) que yo edité, en el cual se alude a aquella reunión que habían mantenido Martínez con Salvai (jefe de Gabinete de la exgobernadora), en la que Vidal interrumpe para pedir el beneplácito de Martínez para ir contra Medina”.
Según afirma Alconada, en ese momento, funcionarios bonaerenses expresaban su temor ante una reacción solidaria de otros sindicalistas, ante una potencial paralización de la ciudad de La Plata, e incluso la provincia de Buenos Aires, “y que por ese motivo, buscaron la venia de Gerardo Martínez antes de avanzar”. Con este testimonio, amparado en sus fuentes y en los informes, queda más que clara la operación de persecución contra uno de los dirigentes sociales emblemáticos de nuestra ciudad, orquestado por el expresidente Mauricio Macri, la exgobernadora María Eugenia Vidal y el titular de la UOCRA Gerardo Martínez.
Pedido de Gerardo Martínez ante la OIT por “violación a la libertad sindical”
Lo llamativo es que Martínez presentó ante la jefa del Servicio de Libertad Sindical de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Karen Curtis, una queja por “violación a la libertad sindical” luego de los dichos del exministro de Trabajo bonaerense Marcelo Villegas en el video de la “Gestapo Antisindical”.
EL gremialista enfatizó que la presentación apunta a denunciar “una serie de hechos, actos, videos y dichos ocurridos en 2017 y conocidos en diciembre último, en clara violación del derecho de libertad sindical reconocido y garantizado por los Convenios 87 y 98 de la OIT”, y sostuvo que las afirmaciones de Villegas procuraron “criminalizar la actividad sindical en un abierto y nada inocente intento para disciplinar a las entidades gremiales disconformes con la realidad de entonces”.