En medio del rechazo al ajuste que el gobierno nacional intenta realizar en la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), los trabajadores de la entidad elaboraron un documento donde exponen los peligros de los recortes que pretenden hacer las autoridades. Bajo el título de Evaluación de riesgos en la seguridad operacional de la aviación, este trabajo busca alertar sobre el impacto de cualquier reducción de personal o cambio de tareas en el trabajo diario de la ANAC, que debe garantizar la seguridad en la actividad. El documento será presentado desde la semana que viene en distintas asambleas a los empleados y los interesados en conocer la situación del sector.
El trabajo fue elaborado por especialistas del sector, a pedido de la coordinación nacional e ATE en la ANAC, y es una descripción pormenorizada sobre los cambios que se quieren hacer y sus consecuencias. “Ponemos en visibilidad los riesgos que significa un ajuste en la ANAC en materia de seguridad área”, destacó Marcelo Belelli, referente nacional del gremio en la entidad, en diálogo con Data Gremial. En particular, Belleli se refirió a despidos que se están produciendo en el organismo, que “tienen impacto en la seguridad aérea y la operatividad de la entidad”.
Entre las conclusiones del documento, se destaca que “la seguridad operacional de la aviación depende directamente de la estabilidad y competencia del personal encargado de su supervisión”. “La reducción de personal técnico no solo deteriora la capacidad del Estado para garantizar estándares adecuados, sino que introduce riesgos que ninguna medida correctiva puede eliminar por completo”, afirmaron. Por eso, no es posible evitar “el impacto negativo de los despidos en la vigilancia de la seguridad operacional, ya que la sobrecarga de trabajo, la pérdida de conocimiento y la disminución de la moral afectan inevitablemente la calidad de las tareas críticas”.
Responsabilidades
En su documento, los trabajadores de la ANAC recordaron “la importancia del cumplimiento de los estándares internacionales en la aviación”, que es “fundamental para garantizar la seguridad operacional, la eficiencia y la interoperabilidad con otros países”. En este sentido, la ANAC, como organismo del Estado, “tiene la responsabilidad de velar por el cumplimiento de la normativa nacional e internacional vigente”. Por eso, consideraron que “el despido del personal del organismo estatal encargado de la vigilancia de la seguridad operacional en Argentina representa un peligro significativo. La pérdida de personal cualificado puede generar una degradación en los niveles de seguridad, con consecuencias potencialmente catastróficas”.
Además, la reducción de personal, ya sea por despidos o recortes en el organismo estatal encargado de realizar la vigilancia de la seguridad operacional de toda la aviación en nuestro país, puede generar “un peligro genérico para la seguridad operativa”. Esto se debe a que “afecta directamente la capacidad de la organización para mantener niveles adecuados de control, coordinación y respuesta ante situaciones críticas”.
Por eso, consideraron que “en un entorno donde la seguridad aérea no admite márgenes de error, la decisión de reducir personal técnico equivale a asumir riesgos que, en última instancia, pueden traducirse en incidentes con consecuencias irreversibles”. “La integridad del sistema de aviación civil requiere reconocer que la estabilidad del recurso humano no es una variable opcional, sino una condición indispensable para la seguridad operacional. Sin inversión en capacitación y sin estabilidad laboral, la seguridad operacional se ve gravemente amenazada, con consecuencias que pueden ser irreversibles para el sistema
de aviación en Argentina”, agregaron.
Transferencia de tareas
Otro punto que toca este trabajo está vinculado al desgaste del personal técnico de seguridad operacional, que tiene “un impacto directo en la seguridad de la aviación”. La fatiga, la sobrecarga de tareas y la inestabilidad laboral son algunos de las cuestiones que detectaron desde ATE-ANAC, que pueden afectar “la atención, la toma de decisiones y la capacidad de respuesta ante eventos críticos”.
Este documento, alertó el dirigente estatal, “está atravesado por otro factor, que es la transferencia de funciones sin la garantía de los puestos de trabajo, lo que genera tensión en el sector, todas cuestiones que atañen a la seguridad aérea”. “Llamamos a la reflexión de todos, para que se interprete que todo trabajador que tiene que controlar un vuelo, que tiene que hacer tareas de sensibilidad, no puede estar en toda su capacidad profesional si se pone constantemente en cuestionamiento su trabajo o si debe preocuparse por el sostén de su familia. mes a mes, como está pasando”, resaltó Belelli.