La Asociación del Personal Jerárquico de la Industria del Gas Natural, Derivados y Afines (APJGAS), a cargo de Rubén Ruiz, expresó la importancia de ser parte del segundo paro general convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) para este jueves 9.
“Para no seguir perdiendo derechos, posibilidades y perspectiva, paramos el país. No es un grito desesperado. Es una muestra de coherencia. No nos regalamos. No nos entregamos. El 9 de mayo paremos la máquina para que el país no sea para unos pocos”, resaltaron desde la Comisión Directiva de la APJ GAS.
A través de un comunicado de prensa, detallaron los diferentes motivos que sobran para sumar al Paro general. Primero, “porque debemos defendernos” señalan y continúan: “porque no queremos ser todas y todas precarizados, en su versión monotributista”.
A su vez, subrayan que defienden los “derechos laborales conquistados” que “no son un regalo de nadie y aseguran un piso mínimo de decencia en la lucha cotidiana que existen en las relaciones laborales”. Además, rechazan que las jubilaciones continúen siendo una variable de ajuste lo cual “condena a los trabajadores y trabajadoras que sostienen el sistema en pobres sistemáticos”.
Con respecto a la vuelta del Impuesto a las Ganancias propuesto por el gobierno de Javier Milei, sostuvieron: “por enésima vez, decimos, el salario no es ganancia”. Asimismo, expresaron: “nos oponemos a que la injusticia impositiva sea ley. Mientras se beneficia con exenciones fabulosas a las grandes empresas se castiga sin ruborizarse a trabajadores y trabajadoras activos y pasivos”.
“No estamos dispuestos a que se abandone el principio de abastecimiento energético a nuestro pueblo bajo el manto de exportaciones salvadoras, cuyo resultado económico quedará en manos de pocos”, sostuvieron.
Neoliberalismo
Entre diversos motivos para salir a luchar este 9 de mayo, también mencionaron que no validan la entrega de los recursos naturales y empresas estratégicas bajo el argumento de que se crearán condiciones para inversiones a largo plazo. “Esa política ya lo sufrimos varias veces y nos trajo hasta aquí”, aseguraron.
“Cambiar este país no significa entregarle las palancas del poder a un número pequeño de grandes empresas para que arrasen con la soberanía nacional y la perspectiva de justicia social ampliada y sustentable”, destacaron.
En tanto, la entidad sindical recordó que las y los trabajadores son quienes producen la riqueza, mientras el Gobierno nacional pretende consolidar niveles de pobreza insostenibles con el pretexto de que el mercado regulará los desequilibrios. “Esa política también la vivimos en diversas oportunidades y trajo aparejado situaciones de terrible desigualdad”, señalaron.
En la misma línea, vociferaron: “no queremos neomenemismo. Ya tuvimos esa dosis ponzoñosa en su versión original que dejó 20 millones de pobres y una peligrosa visión individualista que aún persiste en forma perversa”.
“Sabemos que ajustar en forma salvaje a los más débiles para decir que bajan ese ´impuesto´ corrosivo es falso y nos lleva a un camino oscuro. Los trabajadores y trabajadoras no somos suicidas ni ingenuos”, afirmaron.
Para finalizar, el gremio sostuvo que “ningún gobierno tiene derecho a engañarnos” en referencia a las políticas llevadas adelante por el presidente Javier Milei. “La bronca, la confusión, la frustración también nos trajeron hasta acá. No hay excusas. Creemos necesario recomponer la autoestima colectiva y el proyecto de Nación sin ambivalencias. Los trabajadores y trabajadoras tenemos una responsabilidad en ese camino”, concluyeron.