La ola de calor extremo hace estragos en CABA: quejas por cómo se trabaja en escuelas y hospitales

Los gremios educativos y de la salud denunciaron falta de aire acondicionado, ventilación y hasta agua fresca en medio de esta ola record de altas temperaturas.

04 de marzo de 2023

Este jueves, la Ciudad de Buenos Aires registró una temperatura máxima de 37,9 grados, lo que igualó al récord histórico para marzo que era de 1952, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN). En el marco de una ola de calor extremo que afecta a gran parte del país, se activó la “alerta roja”, un sistema de la entidad nacional para advertir sobre el efecto sobre la salud del calor, que en este caso “puede ser muy peligroso” para todas las personas, incluso las saludables. En este contexto, distintos gremios criticaron las condiciones en las que deben trabajar sus afiliados. Las quejas se escucharon especialmente en colegios y hospitales, donde se vieron afectados las normales tareas por problemas en la ventilación.  Fuerte reclamo a la gestión de Horacio Rodríguez Larreta para que se reviertan estas situaciones.

 

El calor extremo genera inconvenientes en todos los ámbitos, pero en algunos son especialmente peligrosos. En los hospitales porteños, desde el inicio del verano se viene denunciando que por la falta de aire acondicionado se están suspendiendo 20 cirugías por día. Así lo afirmaron desde la agrupación ATE Hospitales, que lanzaron una campaña de denuncia sobre estos problemas. Además, recalcaron que en algunos centros asistenciales los pacientes internados llevan sus propios ventiladores por la falta de climatización. En tanto, en los colegios se registraron muchos problemas con la ventilación, ya sea porque los aparatos no funcionan o porque no hay suficientes. Esto se vio potenciado por el corte de luz generalizado del miércoles pasado.

La verdad que es muy preocupante la cantidad de problemas edilicios y la falta de funcionamientos de los elementos de ventilación en casi todas las escuelas”, sostuvo Pablo Francisco, secretario de la Comisión de Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (CyMAT) del gremio UTE. En diálogo con Data Gremial, agregó que “a esto se le suman los cortes de energía eléctrica de esta semana, que agravan la cuestión”. Al calor agobiante en las aulas se le suma en muchos casos no hay agua fresca para alumnos y docentes. “El agua que sale de las canillas está prácticamente caliente, por eso estamos reclamando al Ministerio de Educación que garantice el suministro de agua fresca”, dijo Francisco.

 

Registro

 

En esta primera semana de clases, con la ola de calor instalada en CABA, desde UTE abrieron un registro de escuelas con dificultades para dar clases con normalidad, y los resultados fueron muy preocupantes: al menos 450 edificios con algún tipo de problemas. “A partir del registro que difundimos nos avisaron de muchas más escuelas, vemos que el problema es muy generalizado, no decimos todas las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires, pero un 80 por ciento está con estas dificultades”, aseguró Francisco.

 

En estos días, por el calor intenso y los problemas denunciados, se multiplicaron las escuelas que no pudieron dar clases. Según UTE, algunas de las escuelas con problemas son el Normal 5, el colegio Normal 11; la escuela N° 12 DE 5, el Colegio 19 DE 17; y la primaria N° 6 DE 7 también la Escuela Especial 7, el colegio DE 8 y el Comercial 23. En tanto, el gremio Ademys publicó en sus redes sociales un listado de edificios con problemas o suspensiones de clases, como la Escuelas en el DE 19, el DE 20 y el DE 17.  También la Escuelas 3 y 19 DE 20, escuelas 3, 6 y 19 DE 13 y escuela 9 del DE 17, sin luz y sin agua.

Una vez más, ante una contingencia climática, queda al descubierto la desidia y falta de inversión en infraestructura de las escuelas de nuestra Ciudad de Buenos Aires”, insistió UTE, que recordó que en el mes de julio del año pasado “desde la Multisectorial por la Escuela Pública denunciamos que más de 200 escuelas presentaban problemas severos de infraestructura en CABA, esto es más del 20 por ciento del total”. Ante esto, Francisco remarcó que “desde UTE estamos planteando que en estas condiciones no se pueden dar clases, si no se garantiza la ventilación y la provisión de agua fresca no puede haber actividad”. “Seguimos en contacto los colegios y los docentes, muchos están elevando quejas vía jerárquicas, y muchas que ya suspendieron las clases por esta situación”, cerró el dirigente.

 

Hospitales colapsados

 

Como los alumnos y docentes porteños, los pacientes del sistema de salud público de CABA sufren el calor, en hospitales que no cuentan con aire acondicionado y que incluso tuvieron que cerrar servicios y suspender operaciones por la situación. Así lo viene denunciando desde que comenzó el verano la agrupación ATE Hospitales, que remarcó que en algunos nosocomios se reprogramas 20 cirugías por día. En enero los casos más extremos estaban en el hospital Durand y el oftalmológico Lagleyze, pero con el tiempo se fueron extendiendo a toda la red pública.

 

Seguimos con suspensiones de operaciones, en el Durand seguimos con varios pisos sin aire, y algunos días se tuvo que cerrar la guardia”, sostuvo Héctor Ortiz, referente de la agrupación de ATE y enfermero en el Durand. Ante la consulta de Data Gremial, recalcó que “el que más se perjudica es el paciente, hay algunos que están internados con cuadros graves y tienen que traer su propio ventilador por el calor”. En estos días, en las redes sociales del gremio se vieron videos y fotos de las consecuencias de realizar tareas en estas condiciones. “No se puede trabajar así”, ratificó Ortiz.

La semana pasada, ante la falta de respuesta del gobierno porteño, los trabajadores de la salud realizaron una protesta bajo el lema “Basta de vaciar la salud pública”, donde recalcaron las dificultades por el calor, que esta semana se potenciaron en más centros asistenciales. Además, sumaron el reclamo por falta de ascensores, otro tema clave. En este sentido, trabajadores del hospital Ramos Mejía denuncian que la mayoría de estos aparatos “no funcionan en el nosocomio”. Todos estos pedidos fueron elevados al ministro de Salud Fernán Quirós, en una serie de reclamos documentados desde ATE. “El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no escucha, mira para otro lado, en algunos casos nos sacaron los dispenser de agua fría, estamos muy mal en las condiciones laborales”, concluyó Ortiz.