Los efectos de la brutal recesión libertaria: las prestaciones por desempleo crecieron un 60% respecto de 2023

Un informe resaltó las pérdidas de puestos de trabajo que se generaron a partir de las políticas aplicadas por el Gobierno de Javier Milei. El lunes, el INDEC dará a conocer los datos oficiales de desocupación.

21 de junio de 2024

La profundización de la crisis económica desde la llegada del Gobierno de Javier Milei provocó pérdidas de puestos de trabajo tanto en el sector público como en el privado. En ese contexto, la cantidad de prestaciones por desempleo de mayo de 2024 fue más de un 60% superior a la que se verificaba en 2023.

Los últimos datos de la Secretaría de Trabajo indicaron una pérdida de más de 95.000 empleos asalariados registrados en el sector privado y de 26.700 en el Estado, entre noviembre y marzo.

Según un informe del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad de Avellaneda (UNDAV), en el quinto mes del año se otorgaron 104.353 prestaciones, mientras que el promedio mensual del año pasado fue de 64.596. Para la entidad, el aumento del desempleo (que va a ser mejor cuantificado el próximo lunes a partir de los datos oficiales del INDEC) es resultado del combo letal para el consumo y la actividad económica que significó la devaluación, el corte de la obra pública y el brusco ajuste del gasto público.

El sector más perjudicado en términos de empleo fue el de la construcción, con una caída de 55.800 fuentes laborales como consecuencia de la eliminación de la obra pública tanto nacional como subnacional, en un marco de fuerte reducción de las transferencias a las provincias.

"Tal vez, la medida que mayor quiebre en el sector privado generó fue la eliminación de la obra pública. En este sentido, entre marzo de 2024 y noviembre de 2023, la cantidad de trabajadores en el rubro de la construcción tuvo un descenso del 12,7%", remarcaron desde UNDAV.

Las políticas llevadas a cabo por el Poder Ejecutivo implicaron una gran contracción en el poder adquisitivo de trabajadores y jubilados, que impactó notoriamente en los niveles de consumo. Esto, sumado al menor gasto público y a la cautela de los inversores privados, generó un derrumbe de la demanda agregada, causando a su vez una ola de retiros voluntarios, paradas de planta y reducciones de la jornada laboral por parte de las empresas.

Como consecuencia, la economía se desplomó un 8,4% anual en marzo (último dato disponible), siendo la construcción, la industria manufacturera y el comercio los sectores más afectados.

Puntualmente, la industria se contrajo 16,6% en abril, destacándose particularmente las caídas en la producción de insumos para la construcción, acero, maquinaria agrícola, electrodomésticos y productos textiles.

Razones de la baja en el nivel de actividad

"La fuerte reducción y licuación del gasto en funcionamiento del estado sumado al resto de las medidas (como el freno en la obra pública, el recorte en las jubilaciones, la quita de subsidios a los servicios públicos y la devaluación del 100% del tipo de cambio oficial), generaron un fuerte impacto en el nivel de actividad y por lo tanto en los niveles de empleo en el sector privado", señala el informe de la UNDAV.

En el informe también se registra la reducción deliberada de la planta del Estado. "Con la llegada al poder del gobierno libertario de Javier Milei se constituyó como uno de los pilares principales de la política económica la reducción de la planta y las contrataciones en todo el sector público nacional. Es así que entre marzo 2024 y diciembre 2023 se perdieron más de 29.700 puestos de empleo en el sector público", informa.