En el “mega DNU” que anunció la semana pasada, el presidente Javier Milei confirmó la reforma de la ley 26.412, en la que se determinaba que “en ningún caso el Estado nacional cederá la mayoría accionaria de la sociedad, la capacidad de decisión estratégica y el derecho de veto en las decisiones” de Aerolíneas Argentinas. Esto abre la puerta a su privatización, o el traspaso del paquete accionario a sus empleados, opción que adelantó en campaña el libertario. Además, se remarcó que se volverá a la política denominada “de cielos abiertos”, dando lugar a la inclusión de las formas llamadas “low cost”, que durante la presidencia de Mauricio Macri vivieron un verdadero boom.
Las dos medidas fueron recibidas con alerta por los gremios del sector, que criticaron la decisión del gobierno, y apuntaron a los problemas que generará tanto en el empleo como en la soberanía. Es que la medida incluye la “cesión, parcial o total, del paquete accionario de Aerolíneas Argentinas S.A. y Austral Líneas Aéreas - Cielos del Sur S.A. y de sus empresas controladas (Optar S.A., Jet Paq S.A., Aerohandling S.A.), a los empleados de las respectivas empresas de conformidad con el Programa de Propiedad Participada”. Para la dirigencia aeronáutica, Milei se arroga “facultades legislativas”, avasallando la división de poderes. Además, hay preocupación por la posibilidad que se achique o directamente cierre la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), en el marco de las medidas para reducir el gasto del Estado nacional.
La nueva norma que regirá a partir de la puesta en vigencia del DNU aclaró que “la cesión de los nuevos derechos se prorrateará entre los empleados que decidan participar en dicho programa de ampliación y que los empleados que participen de más de una de estas empresas deberán optar por su participación en una de ellas”. Ante esto, los gremios del sector cruzaron la iniciativa del mandatario. “El presidente ‘anarco liberal’ Javier Milei ha demostrado en los hechos su pensamiento autocrático y antidemocrático, expresado durante su campaña electoral”, sostuvo Ricardo Cirielli, titular de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA).
Ante la consulta de Data Gremial, el dirigente agregó que el presidente “con la aprobación de sus aliados políticos, intenta concentrar el Poder Ejecutivo y el legislativo, sólo le falta afirmar con regia soberbia, al igual que Luis XVI: el Estado soy yo”. Para Cirielli, el mandatario “reiteró que el ajuste lo iba a pagar la casta política y, en realidad, lo está pagando como siempre el Pueblo”.
Como el titular de APTA, varias organizaciones de trabajadores aeronáutico rechazaron el decreto firmado por Milei, no sólo por la idea de privatizar o vender a la empresa de bandera nacional sino por las formas antidemocráticas. La Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), por ejemplo, se declaró en “estado de alerta” luego del anuncio, y le apuntó a las modificaciones a la legislación aeronáutica, laboral y al régimen de empresas del Estado. Lo mismo hizo la Asociación Argentina de Aeronavegantes, que encabeza Juan Pablo Brey, que remarcó que “hemos sido testigos del más grave atropello a la Constitución Nacional y a la división de poderes desde la recuperación de la democracia”. En tanto, Cirielli insistió con su crítica al presidente: “La casta hoy gobernante quiere retrotraer la Argentina al siglo XIX, esa República oligárquica, donde no existía el voto universal, secreto y obligatorio, y el país era dominado por una minoría opulenta agroexportadora”. “A esa minoría súper adinerada, ahora se le suma la de exportación de minerales e hidrocarburos; más, los capitalistas o especuladores financieros”, concluyó el dirigente sindical.
Nuevo titular de Aerolíneas
En tanto, en medio de las críticas de los gremios esta semana el Directorio de Aerolíneas Argentinas designó a Fabián Lombardo como nuevo presidente de la compañía en reemplazo de Pablo Ceriani, quien presentó la renuncia al cargo el 10 de diciembre último tras la asunción del nuevo Gobierno. Lombardo, quien hasta el momento se desempeñaba al frente de la Dirección Comercial, Planeamiento y Gestión de Rutas de la compañía, también ejercerá la función de Gerente General.
El flamante titular de Aerolíneas Argentinas posee una amplia trayectoria en la industria aerocomercial, ya que comenzó su carrera profesional en la desaparecida aerolínea brasilera Varig, donde ocupó múltiples posiciones ejecutivas teniendo a cargo la gerencia de pricing, encargada de establecer precios de productos o servicios que sean rentables y que permitieran a la empresa maximizar sus ingresos y beneficios.
Lombardo se hace cargo de Aerolíneas en un momento de transición, luego de que el presidente Javier Milei anunciara días atrás el decreto de reforma del Estado, en el que establece, entre otras medidas, la posibilidad de que la línea aérea pueda ser privatizada. El Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 contiene más de 300 medidas, de las cuales varias involucran de manera directa a la aviación, reinstalando a la Argentina dentro de la política de cielos abiertos; la desregulación de los servicios de rampa en los aeropuertos; la liberalización de las tarifas; y la derogación de la norma que impedía una nueva privatización de Aerolíneas Argentinas.
La situación de la ANAC
En tanto, otra situación que inquieta en el sector aeronáutico es lo que pueda pasar con la ANAC, que se espera sea afectada por la reducción de los puestos laborales estatales, ya que los contratados en 2023 dejarán de prestar servicios a fin de año. “No sólo estamos preocupados por lo que pueda pasar con la ANAC o con Aerolíneas Argentinas, también tenemos la decisión de Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA), que según lo decidió el gobierno se transformará en una sociedad anónima factible de ser privatizada”, sostuvo Marcelo Belelli, coordinador nacional de ATE en la ANAC. Sobre la entidad, el dirigente la confirmó a Data Gremial que “se plantea lisa y llanamente su eliminación”.
“El DNU trajo problema en varios aspectos, que estamos viendo con alarma”, recalcó Belelli, que adelantó que este miércoles marcharán junto a la CTA Autónoma y el resto de las organizaciones sindicales a los Tribunales, cuando la CGT realice una presentación judicial contra el decreto presidencial. Además de pedir por la no disolución de la ANAC, los trabajadores rechazan los despidos en el estado nacional. “Estamos cruzados por las políticas de achicamiento y los posibles despidos, todavía no hay confirmación del número de afectados, pero estamos en estado de alerta y movilización esperando las novedades”, destacó Belelli. La idea de ATE es “voltear este decreto, porque si se mantiene no vamos a poder hacer ni medidas de fuerza, hay que tomar todas las medidas que hagan falta”.