Desde hace algunos años, el sector de los informáticos está en auge en el país y las empresas han promovido planes de incentivo para retener a profesionales que tienen propuestas para emigrar al exterior, como la participación en las ganancias y la entrega de acciones de las firmas a favor de los mismos, en el marco de un fenómeno en crecimiento.
Los datos fueron vertidos en un informe de la consultora “Brand Partners” en ocasión de la conmemoración este martes del Día Internacional de las PyMEs.
Ante el desafío que representan para las empresas informáticas los sueldos en dólares, se han promovido una serie de medidas para intentar compensar a los empleados. Según datos del Ministerio de Trabajo, en el año 2022 se registró un incremento del 35% en la cantidad de solicitudes de visas laborales para trabajar en el exterior por parte de profesionales tecnológicos.
Es por eso que muchas firmas han implementado diversas estrategias para retener y atraer el talento. Según un estudio de la Cámara de Empresas de Software (CESSI), el 72% de las firmas han optado por ofrecer planes de participación en las ganancias o acciones de la empresa a los trabajadores, mientras que el 65% de las mismas ha desarrollado políticas de flexibilidad laboral para adaptarse a las necesidades de sus empleados.
La inflación, otro problema
Otro factor a tener en cuenta es el alto índice de inflación, que impacta negativamente en la retención de los informáticos. "Resulta complicado ofrecer salarios y beneficios acordes a la realidad económica y que a su vez compiten con las búsquedas extranjeras, lo que pone en riesgo nuestra capacidad de atraer y retener a los profesionales más calificados”, explicó, por su parte, Héctor Lew, CEO de Megatech.
“Es necesario impulsar la formación de alianzas estratégicas entre las PyMEs y las grandes empresas, promoviendo la transferencia de conocimientos, tecnología y recursos financieros. Estas colaboraciones pueden generar sinergias beneficiosas para ambos sectores y contribuir al fortalecimiento del tejido empresarial en su conjunto”, agregó Lew.
Para el ejecutivo resulta crucial que se fomente la colaboración entre el sector público y privado para encontrar soluciones conjuntas a los diversos desafíos, promoviendo la creación de programas de capacitación y asesoramiento especializados para las PyMEs.
Es que la realidad que vive la Argentina desde hace años es compleja: la falta de recursos, dificultades de financiación y disparidad para la retención de talentos son algunos de los obstáculos más comunes que enfrentan regularmente las firmas para paliar la crisis y, en los hechos, amenazan las propias condiciones de estabilidad del sector.
Sin embargo, los representantes patronales aseguran que con políticas adecuadas y “estrategias empresariales innovadoras” es posible superar estos desafíos y potenciar el papel fundamental que desempeñan las PyMEs en la economía local.
Según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), publicado en 2021, el 27% de las PyMEs tecnológicas argentinas han optado por el financiamiento en el extranjero. Además, se ha observado un aumento en las alianzas estratégicas entre éstas y empresas más grandes, "lo que ha permitido a estas compañías acceder a recursos adicionales y ampliar sus redes de contactos".