Mientras el sistema sanitario está tensionado al límite y el personal de salud se encuentra agotado tras casi un año y medio de pandemia, desde la Asamblea de Residentes y Concurrentes de la Ciudad denunciaron que el Ejecutivo de Horacio Rodríguez Larreta prepara el cierre de las concurrencias –profesionales recibidos que completan su formación de posgrado con prácticas hospitalarias ad honoren, durante cinco años-, lo cual implica un recorte de 1.400 puestos en el sistema público porteño.
Este lunes, el colectivo de residentes y concurrentes que en 2019 peleó y triunfó contra una modificación inconsulta de la ley que rige su trabajo, realizó una conferencia de prensa para visibilizar el nuevo embate.
“Todo el que trabaja en salud entiende que es una medida muy disparatada. Contamos con apoyo y pensamos que por ahí tenemos todavía una chance (de revertirlo). Estamos muy preocupados porque la decisión ya está tomada. Igual que pasó con la ley tan discutida que logramos revertir, nos avisan tres días antes. Es una situación muy grave que no atravesamos antes dentro del sistema público en relación a la formación. Son 1400 puestos que se descontarían del sistema público de salud. No entendemos que se tome esto en medio de la pandemia”, cuestionó Iñaki Sanguinetti, concurrente en el Hospital Álvarez, psicólogo, delegado y miembro de asamblea porteña.
Si bien aún no recibieron una comunicación oficial, el anuncio comenzó a circular hace dos semanas y en algunos hospitales hubo audios de directivos confirmando la medida.
“Creo que es una modalidad del Gobierno de la Ciudad, que instala las cosas como radio pasillo. Cuando eso pasa habitualmente es porque ya está decidido”, advirtió Sanguinetti.
Este miércoles es la fecha pautada para que se publiquen los cupos de concurrentes que se solicitan en cada hospital. Luego, en agosto, se realizan los exámenes: “Deja muy poco margen de acción”.
El mismo miércoles la asamblea se movilizará y reclamará ser recibida en el Ministerio de Salud, para participar de una reunión sobre el tema.
“Teníamos reuniones con el Ministerio y hace un año nos cortaron el diálogo. Fue cuando empezaron a cerrar algunas concurrencias. Algunas chiquitas que pasaron más inadvertidas, como de odontología. Lo más fuerte fue en el Zubizarreta y el Argerich, que no volvieron a pedir cupos”, detalló el concurrente.
Advirtió además que la medida implica un golpe especialmente fuerte para el área de salud mental, que concentra un alto porcentaje de las concurrencias.
Todo esto en un contexto en el que las y los residentes trabajan, entre otras cosas, “armando dispositivos de acompañamiento a colegas y a familiares (de víctimas de Covid). Se viven momentos tétricos en los hospitales, no hace falta aclararlo. Es un momento muy grave”.
Entre los concurrentes se barajaba la posibilidad de que el cierre de concurrencias –que llevan largo tiempo reclamando por su derecho al salario y a una ART- implique una mayor cantidad de residencias: trabajos de formación, pero pagos.
Sin embargo, de acuerdo a la información que manejan hasta ahora, la menor cantidad de concurrencias no se traduciría en un mayor número de residencias.
“Si hay algo que puso en evidencia la pandemia es que necesitamos más personal de salud. Es descabellado que se haga esto ahora. Es recortar 1.400 puestos”, reiteró Sanguinetti.