La ciudad de Río Tercero, en la provincia de Córdoba, se enfrenta a una crisis laboral sin precedentes debido al cierre de la planta de TDI de Petroquímica Río Tercero. El secretario Gremial del Sindicato de Químicos, Lucas Felici, señaló que ya se perdieron aproximadamente 250 puestos de trabajo entre trabajadores directos e indirectos.
En ese marco, el dirigente sindical describió la situación como "muy triste" y destacó el impacto emocional en la comunidad. "La ciudad en general está desolada, está con una tristeza enorme", expresó. Además, alertó sobre el anuncio de retiro voluntario de trabajadores en Fabricaciones Militares, lo que podría aumentar aún más el número de despidos.
A su vez, Felici responsabilizó al gobierno nacional, encabezado por Javier Milei, por la situación actual. Y resaltó: "Córdoba no votó esto", en referencia a las políticas económicas que llevaron al cierre de la planta.
Consecuencias devastadoras
El cierre de la planta tendrá un impacto devastador en la economía local. Felici destacó que cada hora que pasa, el número de trabajadores sin sustento aumenta, lo que afectará negativamente a la ciudad y su entorno.
“La verdad es que estamos pasando un momento muy triste. La ciudad en general está desolada, está con una tristeza enorme. Hoy llevamos 250 despidos aproximadamente entre trabajadores directos de Petroquímica y trabajadores indirectos”, contó Felici.
En declaraciones a Canal 10, el secretario Gremial del Sindicato de Químicos sostuvo: "Incluso han anunciado el retiro voluntario de trabajadores en Fabricaciones Militares. Cada hora pareciera que se acrecienta el número de trabajadores que van a quedar sin sustento en la ciudad con un impacto tremendo en la economía".
Además, Felici señaló que "es una ciudad que tiene 45 mil habitantes donde la industria química ha sido la que le ha dado a Río Tercero el crecimiento que ha tenido durante todos estos últimos años".
"Hasta escuelas técnicas tenemos relacionadas a la industria química. Estamos esperando una respuesta de la empresa. El Ministerio de Trabajo de la Provincia ya ha intimado a la empresa que en 48 horas deje sin efecto no sólo las suspensiones", explicó el vocero gremial.
En la misma línea, el dirigente aseguró que “la fábrica está cerrada” y que “se trata de un lock-out patronal. Con la apertura indiscriminada de las importaciones, esta empresa ha decidido dejar de producir y comprar el producto que antes fabricaba con mano de obra de los trabajadores químicos y petroquímicos”.
Río Tercero en emergencia
El Sindicato de Químicos y la comunidad local exigen medidas urgentes para mitigar el impacto de los despidos y revertir la situación. La ciudad de Río Tercero espera una respuesta del gobierno nacional para evitar una crisis económica y social aún mayor. "Hoy no solo se está destruyendo a los trabajadores químicos y petroquímicos y su fuente laboral. Se está destruyendo toda una sociedad. Lo que está pasando en Río Tercero es catastrófico", aseguró Felici.
"Pedimos a todos los partidos políticos que nos abracen, que nos ayuden a enfrentar esta situación y que logremos de una vez por todas que Javier Milei escuche, que el empresariado escuche, y que juntos logremos poner en marcha las máquinas de nuevo", reclamó.
Por último, Felici resaltó que "Córdoba no votó esto. Córdoba no votó el desempleo, Córdoba votó la producción. Córdoba votó el trabajo digno. Nosotros somos trabajadores. Lo único que queremos es recuperar el laburo para poder llegar a casa y decir con tranquilidad que nuestros hijos van a tener para comer".