Más de un centenar de organizaciones participaron este jueves de la denominada Marcha Federal en Defensa de la Salud Pública y la Vida, donde gremios y entidades de pacientes entre otros colectivos denunciaron políticas de ajuste del gobierno de Javier Milei y sus efectos negativos en ese sector. Con una movilización desde la sede del Ministerio de Salud a Plaza de Mayo, la “marea blanca” rechazó “la creciente descentralización del sistema con su consecuente impacto presupuestario, el deterioro del Plan Nacional de Vacunación y la escasez de insumos y medicamentos”.
La Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan (APyT), despedidos del Ministerio de Salud de la Nación, y trabajadores de los hospitales Posadas, Laura Bonaparte y Sommer y de alrededor de 100 organizaciones de la salud apuntaron a la gestión libertaria y a su brazo ejecutor, el ministro de salud Mario Lugones, quienes “desfinancian a la salud pública”. “La convocatoria surge en un contexto de creciente preocupación por las políticas en salud pública del gobierno nacional de Javier Milei y de su ministro de Salud, Mario Lugones", explicó Norma Lezana, secretaria general de la APyT.
Por su parte, desde la Federación Sindical de Profesionales de la Salud (FESPROSA) señalaron que “la desfinanciación y la precarización laboral están llevando al sistema de salud pública a una situación crítica, afectando directamente la atención que reciben los pacientes”. En tanto, el Frente VIH, Hepatitis y Tuberculosis convocó a la movilización porque la salud está en peligro: “El gobierno de Javier Milei está desmantelando áreas claves que nos protegen a todos en flagrante violación de la Constitución Nacional y las leyes”.
Desarticulación
De esta forma, el personal de salud de decenas de organizaciones como así también, los colectivos de pacientes afectados por la eliminación de programas sanitarios, se movilizaron a Plaza de Mayo para denunciar lo que consideran una política de “desguace” del sistema público de salud.
Además, desde el colectivo que organizó la movida resaltaron que áreas vitales como las que se ocupan de la vacunación, la respuesta integral al VIH, la hepatitis, tuberculosis, la atención de la salud mental y los servicios oncológicos “están siendo desarticulados sin importarle el bienestar del pueblo argentino”. En ese sentido aseguraron que cada día más y más personas pierden acceso a la atención que necesitan: “Estas decisiones no sólo son un ataque a la salud pública sino que ponen en peligro nuestra vida”.
Testimonios
Andrea Ramírez, enfermera del Ramos Mejía y presidenta de la ALE, analizó: “El gobierno nacional odia todo lo público, y la salud es parte de sus objetivos para achicar a su más mínima expresión. Recortan presupuesto, precarizan el salario, eliminan programas y despiden para “ahorrar” y pagar deuda al FMI. Pero además, quieren seguir achicando el sistema público de salud para que avance la salud privada, y de hecho el ministro Lugones es empresario de la ese rubro. Pero no van a poder con los trabajadores de la salud y con la simpatía social que sostiene: vamos a defender los hospitales, centros de salud y el salario del sector hasta el final”.
En tanto, Guillermo Pacagnini, médico del hospital San Martín, dirigente histórico de CICOP y actualmente diputado provincial de Buenos Aires (MST-FIT Unidad), agregó: “A pesar del sindicalismo con ‘peluca’ totalmente borrado, las organizaciones del sector salud, que somos independientes de todos los gobiernos y que él unico compromiso que levantamos es con la causa del derecho social a una salud universal y de calidad, construimos desde abajo una amplia coordinación para reclamar todo”. “Las seccionales independientes de CICOP, la APyT Garrahan, la AGIHM - Moyano, la ALE de enfermería, entre muchas más articulamos una confluencia en defensa propia, de la salud pública. Hoy en la Plaza, logramos una muy representativa convocatoria. Vamos a profundizar este camino porque los enemigos de la salud pública, Milei y Lugones se van a encontrar con más resistencia”, concluyó.