En un contexto de crisis económica, política y social, la situación laboral en Argentina sigue siendo un tema de preocupación, según los últimos datos publicados por la Secretaría de Trabajo de la Nación. Durante los primeros siete meses del Gobierno de Javier Milei, el país perdió 182.500 puestos de trabajo asalariado, lo que incluye empleos en el sector privado, público y en casas particulares.
Esta cifra es aún más alarmante si se considera el último pico de agosto del año pasado, cuando la pérdida de empleos asalariados alcanzó los 204.100. La tendencia es clara: la crisis laboral en Argentina sigue profundizándose, y los trabajadores son los más afectados.
En junio, la cantidad de trabajadores asalariados en el sector privado cayó por décimo mes consecutivo, lo que indica una pérdida de estabilidad y seguridad laboral. Mientras tanto, se aceleró el incremento en el número de monotributistas, lo que sugiere una mayor precarización laboral.
En ese marco, algunos sectores combativos de la CGT llaman a movilizar a las regionales para eludir la quietud de la conducción.
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Según los datos arrojados por la cartera que dirige Julio Cordero, el empleo registrado total aumentó 0,1 por ciento en junio, gracias a la incorporación de más de 40.000 trabajadores independientes con monotributo. Sin embargo, este aumento no compensó la baja de 12.600 empleos asalariados formales en el sector privado.
En esa línea, la cantidad de monotributistas superó en 164.500 a la de noviembre de 2023 y en 191.000 a la de agosto del mismo año. Desde la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada, solo en marzo se verificó una reducción en este segmento.
Los datos reflejan un deterioro del mercado laboral, con una pérdida de fuentes laborales en el segmento con mayor estabilidad y seguridad, y un aumento de puestos de trabajo en formas de contratación más flexibles. Esto puede tener graves consecuencias para los trabajadores y sus familias, ya que la precarización laboral puede llevar a una mayor inestabilidad económica y social.
En cuanto a los salarios, los trabajadores formales en el sector privado experimentaron un aumento real de 3,9 por ciento en junio, el tercer incremento seguido por encima de la inflación. Sin embargo, los ingresos de este segmento de trabajadores quedaron 2,2 por ciento por debajo de noviembre.
En conclusión, la situación laboral en Argentina sigue siendo un tema de preocupación, con una pérdida de puestos de trabajo asalariado y un aumento de la precarización laboral. Es fundamental que el Gobierno y los sectores involucrados trabajen juntos para encontrar soluciones que garanticen la estabilidad y seguridad laboral para los trabajadores argentinos.
Denuncia de la CGT: 25 mil empleos destruidos en industria
La CGT cruzó al gobierno nacional por el fuerte impacto en el sector industrial debido a las políticas económicas. La central sindical compartió datos sobre la caída de la producción y la pérdida de empleos en el sector. La entidad habló del “golpe a la industria” que asestó Javier Milei y compartió datos numéricos del período junio 2024 – junio 2023, que argumentan las críticas al Ejecutivo. En total, se perdieron unos 25 mil puestos de trabajo industriales por estas políticas.
“Datos para entender la caída que sufrió el sector industrial el último año: 20,4 por ciento es la caída del sector industrial manufacturero, 14 puntos porcentuales se redujo la capacidad instalada en la industria, 20 por ciento es la caída de la producción industrial”, enumeró la CGT.