A cuatro días de conocerse los resultados del balotaje, el presidente electo Javier Milei salió a anunciar sus diferentes políticas que llevará adelante a partir del 10 de diciembre, entre las que se encuentra la suspensión de la obra pública y traspasar todo a manos de empresas privadas. Un fuerte golpe para el sector de la construcción.
Ante ello, el titular de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), Gustavo Weiss, aseguró que "ya hay telegramas de despido en empresas ligadas a la obra pública". Y alertó que "si las obras se paran como dice Milei, y vuelven a licitarse, se quedarían en la calle miles de empleados y muchas empresas quedarían complicadas".
En declaraciones a Radio 10, el presidente de la Camarco detalló que “ya hay telegramas de despidos en las empresas por los dichos de Milei. Las empresas emiten facturas con 60 días de antelación normalmente y están diciendo que no van a ejecutar más si no se les paga”.
Para el dirigente empresario, los anuncios del presidente electo Javier Milei sobre la paralización de la obra pública es una idea de ir a un modelo "a la chilena". A su vez, contó que que mantuvo una reunión informal con Guillermo Ferraro, el próximo súperministro de Infraestructura del gobierno neoliberal, sin embargo, no obtuvieron respuestas concretas.
“Ferraro en KMPG, trabajó como consultor para empresas privadas y para la Camarco. Lo conocemos muchísimo en el sector. Tuvimos una conversación informal para comentarles la situación. Él no nos transmitió ningún mensaje concreto del futuro para ver si todo esto que se está diciendo públicamente va a ser así”, relató.
En tanto, Weiss señaló que no tuvo la oportunidad de reunirse con Milei pero lo que “él transmite en su mensaje es que, si los municipios y las provincias no tienen dinero, van a tener que conseguir un privado que se interese en hacer la obra. Eso en el mundo no supera el 7% a 10% de la inversión total porque no hay negocio para el sector privado”,
En ese sentido, explicó que si el presidente electo concreta sus planes, habrá un “crack muy importante” en la economía al paralizar “3.500 obras que están en ejecución en todo el país con fondos nacionales”, y que emplean “300.000 personas que pasarían a la calle”. Además –advirtió- “muchas empresas van a estar muy complicadas y al borde del concurso de acreedores”.
La paralización también afectará al trabajo indirecto porque “si la obra pública desaparece, afectará también a las fábricas de insumos”, consideró el dirigente empresario. A la vez que sostuvo: “no son muchas las obras públicas que tengan rentabilidad para que el privado se interese”, lo cual augura “un futuro complicado”.
¿Qué dijo Milei sobre la obra pública?
Este miércoles por la noche, Javier Milei ratificó su plan de frenar toda la obra pública y volvió a argumentar que "no hay plata". Además, argumentó si no hay privados interesados en una licitación "significa que esa obra no tenía sentido desde el punto de vista económico".
"La obra pública se termina, no tenemos plata. Hay que licitarla para que la haga el sector privado. Y si nadie quiere hacerla, significa que esa obra no tenía sentido desde el punto de vista económico y alguien va a tener que explicar por qué hicieron una obra que nadie quería hacer", se explayó el presidente electo.
Por último, Milei durante una entrevista televisiva reafirmó que “las obras van a tener que ser hechas por iniciativas privadas”. Allí también habló de privatizar Aysa y los ferrocarriles argentinos, en la misma sintonía de lo propuesto en su campaña.