En un clima de ajuste y recorte tanto en el sector estatal como público, la fábrica de calefactores Eskabe que se encuentra en la localidad bonaerense de Mar del Plata, pretende suspender a 33 operarios. Ante ello, la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de esa ciudad encabeza la negociación con la empresa para evitar que se perjudique las condiciones salariales de las y los trabajadores.
“Las negociaciones están estancadas y por ahora no hay suspensiones. Todavía no pudimos ponernos de acuerdo con la empresa. Nosotros queremos que la gente no pierda poder adquisitivo y más en este contexto. Estamos todavía negociando”, afirmó José Luis Rocha, titular de la UOM de Mar del Plata.
En declaraciones a 0223, el dirigente gremial aclaró que, tras la intención de la empresa en suspender a 33 empleados durante julio, agosto y septiembre, la UOM “tiene claro de solicitar lo que menos perjudique a los trabajadores”. A su vez, el también secretario general de la CGT Mar del Plata puso como ejemplo que una de las condiciones para llegar a un acuerdo es garantizar los puestos de trabajo.
“Dentro de las suspensiones, pedimos que se deje firmado el compromiso de la empresa en no despedir a nadie. Por ahora no pudimos ponernos de acuerdo, pero tenemos tiempo hasta julio”, subrayó.
Vale mencionar que la empresa Eskabe atravesó otros tiempos de crisis económica con despidos y/o suspensiones: superó los ´90, la debacle del 2001 y también durante el macrismo entre 2015 y 2019. "En el período del macrismo fue un momento más grave porque desde la empresa pedían más de 100 despidos y finalmente acordamos suspensiones y planes de pagos”, recordaron desde el gremio metalúrgico.
A seis meses del gobierno neoliberal de Javier Milei donde su plan motosierra ya arrasó con cientos de miles de despidos en todos los sectores, Eskabe pidió la suspensión de 33 operarios de los 99 que posee actualmente una de las dos plantas fabriles que posee en la Argentina.
Paritaria UOM: dictaron la conciliación obligatoria
La intervención de la secretaría de Trabajo frenó el inicio del plan de lucha de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), que este lunes iba a comenzar con paros de 15 minutos por hora en el sector metalúrgico, ante la falta de respuesta a sus reclamos salariales. El fin de semana, se dictó la conciliación obligatoria por cinco días y evitó las medidas de fuerza programadas para esta semana en fábricas y plantas de todo el país. Además, llamó a una reunión clave para este miércoles.
El gremio liderado por Abel Furlán había lanzado un cronograma de paros intermitentes ante la falta de acuerdo salarial en la rama 17 de la semana pasada. La decisión fue adoptada por la Dirección Nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo, organismo dependiente de la Secretaría de Trabajo de la Nación. Además, no hay acuerdo en el conflicto de la rama 21, de la industria siderúrgica.
El período de conciliación obligatoria comenzó este lunes a las 00 horas y se extenderá durante los próximos cinco días, donde se dará continuidad a las tratativas entre la UOM y las cámaras CAMIMA, AFARTE, CAIAMA, AFAC, FEDEHOGAR y ADIMRA.