Hugo Benítez, líder de la Asociación Obrera Textil: “La apertura indiscriminada de las importaciones es un certificado de muerte para la producción y el trabajo nacional”

El titular de la Asociación Obrera Textil argumentó que “es mentira que significarán una baja en la inflación” e instó al gobierno de Javier Milei a “desistir de aplicar estas políticas, que alimentarán la creciente precarización laboral”.
 

Jueves, 27 de marzo de 2025 17:55

La Asociación Obrera Textil (AOT) expresó su firme rechazo a las medidas de apertura indiscriminada de las importaciones, anunciadas por el Ministerio de Economía, y advirtió sobre "las graves consecuencias que esta baja de aranceles va a significar para la industria local en general y específicamente en la actividad textil”.

Al respecto, el  secretario General de AOT, Hugo Benítez, afirmó que el sector ya vive una caída de la producción, que “provoca una reducción de horas laborales en los diferentes turnos de las empresas, con el peligro que se produzcan más suspensiones a trabajadores, sumado a achicamientos y cierres de fábricas, que significará un incremento de la pérdida de fuentes de empleo”. 

Además, el dirigente sindical resaltó que “el gobierno nacional debe desistir de aplicar estas políticas, que alimentarán la creciente precarización laboral”.

“Es mentira que más importaciones significarán una baja de la inflación y una mejora del consumo en el mercado interno, ya que, de esta manera se seguirá destruyendo el poder adquisitivo de la población”, sentenció y destacó que “el desarrollo de la producción nacional y la creación de puestos de trabajo es el camino hacia el verdadero desarrollo de nuestro país”.

En defensa de la producción local

En este sentido, el titular del gremio textil remarcó el compromiso sindical de “defender la producción nacional y las conquistas laborales como garantía para sostener los puestos de empleo y el poder de compra salarial”.

La AOT se hizo eco así de todos los indicadores que exhiben un retroceso de la actividad en todo el país, en el que señaló  “el sostenimiento de un dólar barato y la caída de aranceles para incentivar la llegada de productos extranjeros, será una sentencia de muerte para la industria argentina”.

Por el contrario -concluyó- el rol del Estado es incentivar la producción y el trabajo argentino, apostando a los recursos nacionales genuinos, que garanticen el buen funcionamiento de la economía, evitando el crecimiento del descontento ciudadano, con mayor conflictividad y la amenaza de desestabilización de la paz social”.

Reunión en el Congreso Nacional

Asimismo, senadores y diputados se reunieron en el Salón Frondizi del Senado de la Nación con empresarios del sector textil, quienes manifestaron su preocupación por la crisis que atraviesa la industria nacional debido a la inminente reducción de aranceles a las importaciones.

En este encuentro, participaron los senadores Guillermo Andrada y Lucía Corpacci de Catamarca, Fernando Salino de San Luis, y Fernando Rejal de La Rioja, así como los diputados Ricardo Herrera de La Rioja y Sebastián Noblega de Catamarca. También estuvieron presentes el Ministro de Industria, Comercio y Empleo de Catamarca, Sebastián Caria, y el Ministro de Trabajo, Empleo e Industria de La Rioja, Federico Bazán. Durante la reunión, los propietarios de las compañías describieron la alarmante situación del sector, enfatizando la gravedad de la crisis. 

En tanto, los  representantes de los ejecutivos provinciales expresaron la preocupación de los gobernadores y la necesidad de implementar recursos legislativos que proporcionen soluciones urgentes.

LOs industriales expresaron su deseo de competir en un entorno justo que les permita triplicar el empleo y duplicar las exportaciones. Enfatizaron que el sector textil, está altamente atomizado con 5,000 empresas que enfrentan desafíos significativos. Sin embargo, hicieron hincapié en la necesidad de eliminar cargas que afectan su capacidad de operación. También resaltaron que la industria es un blanco fácil de ataque por parte del gobierno nacional y que no deberían tener que justificar su valía; es esencial que el gobierno cumpla con sus responsabilidades.