Se puede suponer que la reciente suba del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias puede representar un alivio para trabajadores que habían sido alcanzados por el tributo y que, a quienes lo deben seguir pagando, no les representaría una gran carga. Pero no es así. Sobre todo, para aquellos empleados que, al obtener alguna mejora en sus ingresos, el fisco les recalcula el ingreso anual, aplicándoles descuentos muy gravosos.
Tal es el caso de los jerárquicos de bancos oficiales que, tras la actualización de haberes, están padeciendo deducciones muy altas. Es por eso que en las últimas horas le solicitaron al Banco Nación una solución por cuenta de la propia entidad.
Un problema que se agudiza
“Cada vez que se actualiza nuestro salario o se cobra algún premio, lo conseguido se ve diluido por la exacción impositiva. Más allá de discusiones bizantinas, en la práctica, vemos que la situación atenta contra la carrera bancaria, ya que desalienta cualquier tipo de ascenso, y lo que es peor va en contra de objetivos comerciales del banco, porque entonces: ¿Para qué tratar de producir más y alcanzar los objetivos fijados, si el impuesto lo va a absorber?”, plantea la Asociación Personal Jerárquicos de Bancos Oficiales (APJBO), mediante un comunicado al que accedió Data Gremial.
Es por eso que exhortan a las autoridades del banco a que “analicen cualquier alternativa viable para, por lo menos, reducir el impacto que soportan nuestros bolsillos”.
Y advierten que de seguir esta situación, creen que “va a ser difícil que alguien quiera trasladarse para cubrir un puesto de mayor responsabilidad sin percibir una diferencia salarial significativa, como también desalentar el cumplimiento de las metas”.
“Por ello, solicitamos a las autoridades del BNA brinden una solución a esta complicada y perjudicial situación que atravesamos los trabajadores”, concluye el documento que lleva la firma de la comisión directiva nacional del gremio.
Descuentos cada vez más significativos: lo que se pierde en números
Para tener idea del peso de los descuentos en la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores del sector, Arturo Fabián Quiñoa, secretario general de la APJBO, describe un ejemplo concreto.
“Hay gerentes de sucursales que hoy en día le están descontando hasta $ 200.000, cuando antes le descontaban $90.000”, detalla el dirigente en diálogo con Data Gremial.
En ese sentido, grafica: “Cuando hay suba de haberes, AFIP recalcula el ingreso anual, y sobre eso te descuenta la diferencia en relación a lo que te venían cobrando”.
“Le pedimos al banco que, teniendo en cuenta que no hay una solución al problema de los trabajadores de ingresos superiores, que en mientras tanto implementen algo para que el efecto no sea tan nocivo”, concluye Quiñoa.