En un clima de alta perdida de poder adquisitivo y despidos masivos que sacuden a todo el país, la provincia de Córdoba no es la excepción. Esta semana se conocieron los datos arrojados por la Unión Industrial de Córdoba (UIC) los cuales expresan un panorama muy complicado para la industria cordobesa en el primer cuatrimestre.
Según señala el informe realizado por la UIC entre sus asociados, se registraron despidos, baja de producción, caída de la rentabilidad y menores inversiones, en la provincia que aporta alrededor del 10 por ciento del PBI nacional.
En detalle, el 45 por ciento de los consultados aseguró que durante el mes de abril produjo menos que en los tres primeros meses del año, los cuales ya habían sido complicados. “El mes de abril fue testigo de una contracción en la dinámica de pedidos locales. El 51 por ciento de los entrevistados experimentaron una contracción en su cartera de pedidos, mientras que un 28 por ciento logró mantenerse a flote en un mar de incertidumbre económica”, sintetiza el relevamiento de la Unión Industrial de Córdoba.
Los datos marcan que los industriales reportaron una reducción en el volumen físico de fabricación en comparación con el promedio mensual de enero a marzo.
“Este debilitamiento productivo refleja una desaceleración significativa en la actividad manufacturera, lo cual puede tener serias implicaciones tanto para la competitividad de las empresas locales como para los ingresos del sector”, indica el reporte.
La derivación de ese escenario es el recorte de puestos de trabajo: “aunque 70 por ciento de las industrias no variaron su dotación de personal, la reducción del 24% en la cantidad de empleados refleja un impacto sustancial en el factor laboral, indicando ajustes y posibles dificultades en el ámbito laboral”.
En la misma línea, el informe del relevamiento acentúa que es “particularmente crítica” la situación en el caso de las microempresas, entre las que casi un tercio “tomó decisiones que implicaron reducir la cantidad de colaboradores”.
A su vez, vale mencionar que el deterioro del bolsillo llevó a una fuerte caída del consumo y eso empezó a impactar primero en el comercio y luego se trasladó aguas arriba hacia a la industria.
Inminente nueva ola de despidos
El vocero presidencial Manuel Adorni ratificó el pasado 27 de mayo que se vienen nuevos despidos de trabajadores y trabajadoras estatales a partir de fin de junio. Al tiempo que consideró: "es sano que se revise cada uno de los rincones del Estado".
"Habrá una segunda revisión que tendrá efecto a partir del 30 de junio, ya lo habíamos dicho", agregó Adorni en su habitual conferencia de prensa. A la vez, resaltó que hay que "revisar el funcionamiento de ciertas áreas, si es correcto”.
A su vez, el funcionario se refirió a las contrataciones que fueron prorrogadas entre febrero y marzo pasado por 30 o 60 días. A principios de abril, el Gobierno confirmó que ya habían sido despedidos 15 mil trabajadores estatales, e incluso Javier Milei había estimado que el número llegaría a 70 mil.