La reunión del Consejo del Salario de ayer jueves finalizó sin acuerdo entre los gremios y las empresas, por lo que el gobierno deberá definir por decreto el aumento, como todas las veces que se constituyó en la era libertaria. Del cónclave, realizado de manera virtual, participaron representantes de las dos CTA y de la CGT, de las cámaras empresarias y de la Secretaría de Trabajo de la Nación. Desde el sector sindical, acusaron al gobierno de realizar una nueva maniobra para poder definir un aumento arbitrariamente, lejos de los planteos presentados.
La nueva reunión del Consejo del Salario fue convocada por el gobierno nacional con el objetivo de fijar el aumento del Salario Mínimo, Vital y Móvil. Las tres centrales obreras fueron con el planteo de recomponer el salario en una cifra que esté por encima de la canasta de la pobreza. De acuerdo a esto, el mínimo tendría que alcanzar los 1.001.466 de pesos. Camino a alcanzar esta cifra, se exigió que en el mes de diciembre, supere la canasta de indigencia, que es de 572 mil pesos, cuando los actuales 271.571 pesos no significan ni la mitad de ese valor.
Lo que en un principio sonaría a una propuesta razonable ni siquiera fue contemplado por el sector privado, que ofreció un aumento del 8,8 por ciento en cuatro cuotas: 278.361 pesos de diciembre, 284.607 pesos en enero, 290.310 pesos en febrero, y 295.469 pesos en marzo. Con estas cifras, el acumulado a marzo sería de 24 mil pesos. La propuesta fue rechazada por las tres centrales al considerarla insuficiente y el gobierno llamó a un cuarto intermedio.
Misma metodología
Cabe recordar que desde la llegada de La Libertad Avanza al poder, ninguna reunión del Consejo del Salario culminó con un acuerdo y terminó siendo el gobierno el que actualizó el monto, siempre en una cifra más cercana al planteo patronal. La última vez, en julio, el secretario de Trabajo Julio Cordero estableció que el aumento sería de 15,9 por ciento en cuatro tramos.
La última vez que se actualizó el haber mínimo fue en julio y también fue por laudo, cuando el secretario Julio Cordero fijó un aumento de 15,9 por ciento en cuatro tramos. En la mesa de negociación de este jueves, el objetivo era mejorar ese piso salarial, hoy en 271.571 pesos. En lo que va del año, ese ingreso mínimo acumula un incremento de 74,08 por ciento, contra una inflación de 107 por ciento.
Críticas
Ante “semejante propuesta” las tres centrales sindicales rechazaron de manera unificada la posición empresarial y responsabilizaron a estos y a las autoridades del Gobierno por el vaciamiento del Consejo del Salario.
Asimismo, desde las dos CTA se reclamó que “el Consejo del Salario sea un ámbito de funcionamiento permanente que, además de fijar el salario mínimo, aborde otras problemáticas de la clase trabajadora tales como el empleo precario, o el desempleo que es cada vez mayor en Argentina”.