En mayo una docente de la escuela porteña fue obligada a jubilarse. A partir de ello, llevó adelante una medida de acción de amparo contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) para resguardar su puesto de trabajo. La justicia porteña declaró nula la decisión del GCBA.
Según informó Telam, la jueza Alejandra Petrella falló a favor de la docente al considerar varios informes producidos en el expediente. Ponderó la situación económica familiar de la trabajadora, la cual se vería afectada con su inmediata jubilación. Principalmente el acceso a la salud, ya que "la cesantía en el empleo del GCBA implicaría una reducción en el salario del 40.9 % y la empresa de medicina prepaga sufriría un aumento del 50 %", señaló el fallo.
A su vez, consideró el aval de la directora del establecimiento donde la mujer trabaja para continuar en su cargo. En 2021, allí realizaron una evaluación y la docente "fue calificada con la nota más alta durante su desempeño laboral en 2018, 2019 y 2020".
La trabajadora de la educación tiene una larga trayectoria en el ámbito educativo privado y público. Desde 2009 se desempeña como profesora de letras y facilitadora virtual en el Programa Adultos 2000 del GCBA.
Derechos laborales
En la medida de acción de amparo la mujer aseguró ser el único sostén de su grupo familiar, integrado por su cónyuge y sus tres hijos. También manifestó que en septiembre de 2021 con casi 57 años -edad que habilita la jubilación si se cuenta con los aportes pertinentes- pidió seguir ejerciendo según el artículo 35 del estatuto docente.
Por último, resaltó que la Ley 24.016 otorga a las docentes el derecho de acceder a la jubilación en forma anticipada. Pero "de ninguna manera puede interpretarse como una restricción a los derechos de las trabajadoras en condiciones psicofísicas de seguir en actividad".