En las últimas horas, se celebró la primera reunión del año del Frente de Gremios Estatales y de las Empresas Públicas, espacio conformado al inicio de la gestión de Javier Milei con el fin de frenar el desmantelamiento de la administración pública nacional. La convocatoria, que tuvo lugar en la sede de la Federación Judicial Argentina (FJA), se centró en definir estrategias para enfrentar los despidos, el cierre de organismos y las políticas que vulneran los derechos de los trabajadores.
El encuentro fue inaugurado por Matías Fachal, secretario General de la FJA, quien, junto al resto de los participantes, subrayó el contexto de creciente conflictividad social y laboral que se prevé para 2025, particularmente en el sector estatal. Todos coincidieron en que la movilización del 1 de febrero, que convocó a cientos de miles de personas bajo las consignas antifascistas y antirracistas, fue un claro reflejo de la respuesta unificada de los gremios frente a las políticas y medidas del gobierno de Javier Milei.
Evaluación de 2024 y propuestas de acción
La reunión sirvió también para hacer un balance de lo realizado por el Frente de Gremios Estatales y de las Empresas Públicas en 2024. Los dirigentes coincidieron en la necesidad de fortalecer la unidad contra las políticas del gobierno, que consideran responsables de la precarización de los trabajadores. También se destacó la importancia de ampliar el Frente a otros sectores del Estado y trabajar en la federalización de las acciones.
Una de las principales propuestas surgidas fue convocar un plenario amplio de Salud, sector que atraviesa una grave crisis de desfinanciamiento, despidos masivos y el cierre de programas y hospitales. Esta situación ha generado una creciente preocupación entre los trabajadores, que denuncian un plan gubernamental para reducir salarios, ofrecer incrementos mínimos y mejorar poco las condiciones laborales.
Crisis en el sector salud: despidos y movilizaciones
El sector de la salud, particularmente los hospitales Garrahan y Bonaparte, se vieron fuertemente afectado por la ola de despidos.
En el Garrahan, a pesar de que las vacunas del Calendario Obligatorio siguen garantizadas, el personal administrativo y técnico se enfrenta a la incertidumbre sobre su continuidad laboral.
En tanto, en el Bonaparte 200 trabajadores fueron despedidos sin previo aviso en enero, lo que provocó una fuerte resistencia por parte de los empleados, que se manifestaron frente a la sede. También se ha reportado la recepción de 150 telegramas de despido en el Hospital Sommer, en General Rodríguez.
Es por eso que durante el encuentro se definió una "marcha nacional por la salud", solicitando unidad entre los gremios y organizaciones sanitarias de todo el país para sumar fuerzas y visibilizar estos reclamos.
El Frente de Gremios Estatales y de las Empresas Públicas está integrado por una veintena de organizaciones sindicales entre las que se encuentran además de la FJA, la Federación del Personal de Vialidad Nacional (FEPEVINA), la Asociación Personal Jerárquico de Bancos Oficiales (APJBO) y ATE, entre otros.
Retiran a la República Argentina de la OMS
En un comunicado emitido el miércoles, la cuenta de X “Oficina del Presidente” anunció que la República Argentina dejará de formar parte de la Organización Mundial de la Salud. Las consecuencias que esto puede traer aparejado son miles, pero los argumentos citados no dejan de ser curiosos: “La OMS fue creada en 1948 para coordinar la respuesta ante emergencias sanitarias globales, pero falló en su mayor prueba de fuego: promovió cuarentenas eternas sin sustento científico cuando le tocó combatir la pandemia de COVID-19”
También suscriben: “Hoy la evidencia indica que las recetas de la OMS no funcionan porque son el resultado de la influencia política, no basadas en la ciencia. Además ha confirmado su inflexibilidad para cambiar su enfoque y, lejos de admitir errores, elige continuar asumiendo competencias que no le corresponden y limitando la soberanía de los países”.
Consecuencias
“La OMS tiene un rol importante para la coordinación de emergencias sanitarias, el control de brotes, en prevención de enfermedades, cooperación internacional y en la promoción de transferencia de tecnología”, explicaron desde la Fundación Huésped, quiénes rápidamente cruzaron al Gobierno Nacional ante la noticia.
“Además, la OMS tiene un fondo de financiamiento y mecanismos de apoyo logístico para cuando hay emergencias sanitarias y desastres naturales. Salir de la OMS significa no poder contar con esto, en caso de que lo necesitemos”, sumaron.
Leandro Cahn, director ejecutivo de Fundación Huésped, dijo que, además de consecuencias sanitarias, de seguimiento de brotes y de promoción de transferencia de tecnología, la decisión costaría dinero. “No se podrían comprar vacunas y tratamientos para VIH a través de su fondo rotatorio, que abarata muchísimo los costos”, señaló.
El ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós resaltó que “es muy importante tener una institución de coordinación, especialmente en los períodos pandémicos que estamos viviendo”. “No es una cuestión de estar en la OMS o en otra organización, sino que es necesaria la coordinación. Todavía no hemos escuchado cuál es la propuesta de coordinación sanitaria que vamos a tener para adelante”.