En el marco de la creciente inflación que se vive en estos días, con un IPC que está creciendo a un ritmo de más del 20 por ciento mensual desde que asumió Javier Milei la presidencia, los gremios presionan para que haya revisiones salariales todos los meses, buscando frenar el desplome del poder adquisitivo. En este contexto, trabajadores de la industria del gas reclamaron a las empresas del sector una recomposición para enero y febrero de este año, ante un escenario inflacionario que “destruye el salario”. “El aumento es una necesidad” afirmaron.
Mediante un comunicado de prensa conjunto, el Sindicato de Trabajadores de la Industria del Gas de Capital y Gran Buenos Aires (STIGAS) y la Asociación del Personal Jerárquico de la Industria del Gas Natural, Derivados y Afines (APJ GAS) expresaron que los trabajadores “vemos como se licúa el poder de compra de los salarios”. Por estas razones, las organizaciones sindicales firmantes solicitaron a las empresas de distribución, comercialización y transporte de gas natural “un aumento que equipare la inflación de enero y febrero que consideramos redondeará el 40 por ciento acumulado para todos los trabajadores/as del ámbito de concesión del servicio”.
Además, las entidades reclamaron “que dichos aumentos se abonen durante el mes de marzo 2024”. “Entendemos que no existe margen para dilatar la compensación salarial que regenere lo perdido durante los dos primeros meses del año y que ese posible acuerdo genere un piso razonable para el comienzo de las negociaciones paritarias en un 2024 difícil pero en el que la industria del gas natural desempeñará un papel de importancia”, expresó el texto, que lleva la firma de Pablo Martín Blanco por STIGAS y Rubén José Ruiz por APJ GAS.
Contexto complicado
Las entidades gremiales de la industria del gas recordar que en el sector del gas natural “logramos alcanzar la inflación 2023 un mes después”. Sin embargo, aclararon, “el incremento del costo de vida durante enero y febrero sigue parámetros parecidos a los que veníamos padeciendo con un horizonte complicado (más aumento del transporte, luz, gas, agua, salud, educación, alquileres, expensas)”.
Ante esto, es necesario recordar que la pérdida en la regularidad de los aumentos salariales “es contraria a nuestra lucha contra la inflación corrosiva”. “Un acuerdo de este tipo es necesario y razonable. Los trabajadores que garantizamos el servicio público de distribución y transporte de gas natural en la República Argentina lo necesitamos y lo reclamamos. La industria está en condicionarlo de absorberlo”, afirmaron.
Aumento para encargados
En tanto, la Federación Argentina de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal (FATERyH) acordó un incremento salarial del 45 por ciento para febrero y pautaron con las cámaras del sector empleador volver a reunirse a fines de mes para evaluar una nueva recomposición. Los encargados de edificios tendrán un sueldo básico de 441.447 pesos para el caso de la categoría con vivienda en el edificio y de 518.912 pesos en los casos de encargados sin vivienda a partir de la suma acordada.
El aumento, que impactará en las expensas de los edificios, se calcula sobre el salario básico de enero para la cuarta categoría establecida en el Convenio Colectivo de Trabajo, aplicándose a los adicionales y en forma proporcional a las restantes categorías, en concepto de la remuneración de febrero. En el comunicado que detalló la nueva escala salarial, el secretario general del sindicato, Víctor Santa María, aseguró que “el país atraviesa una crisis sin precedentes, este duro momento exige mucha responsabilidad y apoyo para todos los trabajadores y trabajadoras”. Y agregó: “Hoy cerramos las negociaciones paritarias con un 45 por ciento de aumento sobre el sueldo básico de enero de nuestros afiliados”.
Asimismo, remarcó que “la creciente inflación acumulada a lo largo de 2023 y las imprevistas medidas en el sector de la economía adoptadas a partir de diciembre pasado impactan en el incremento del costo de vida, en el aumento de precios y en la pérdida del poder adquisitivo de los salarios”. En ese sentido, el sindicalista sostuvo que “este escenario interpela a las partes en aras del cumplimiento efectivo de la demanda constitucional de condiciones dignas de trabajo, suficiencia del salario base de la subsistencia de los trabajadores/as, e indica la necesidad de mantener el poder adquisitivo de la remuneración”.