Tras varias semanas de negociaciones y medidas de fuerzas adoptadas por la Unión Tranviarios (UTA) Automotor que lidera Roberto Fernández, este martes 21 arribaron a un acuerdo paritario con las cámaras empresariales del sector. Las partes establecieron el pago de tres sumas no remunerativas de $250.000 para mayo, junio y julio, llevando el básico del mes corriente por encima del millón de pesos.
Según detallaron desde el gremio de los choferes de colectivos, en mayo, el personal de corta y mediana distancia del AMBA tendrá un salario básico inicial de $737 mil pesos. A eso se le sumarán $ 101.160 en concepto de viáticos y una de las tres sumas acordadas de 250 mil -a pagar durante el mes de mayo-, alcanzando un total de $ 1.088.160.
En junio, el salario conformado inicial será de $1.000.000, más $137.256 en viáticos y la segunda suma no remunerativa de $250.000 a pagar antes del 15 de junio, llevando el total a $1.387.256.
Mientras que los haberes básicos en julio alcanzan el $1.060.000, más un adicional por viáticos de $145.488 y la última suma no remunerativa de $250.000 -a pagar antes del 15 de julio-, alcanzando un total de $1.455.488.
A su vez, el gremio adelantó que, en el mes de agosto, los choferes cobrarán una suma fija no remunerativa de $ 100.000 a cuenta de futuros aumentos.
En este sentido, el incremento salarial logrado por la UTA en estos siete meses del año es un 97,4 por ciento en total. El sueldo básico de diciembre era de $ 537.000. A su vez, sumaron a la fecha un total no remunerativo de $ 1.240.000, lo que equivale en siete meses a una remuneración mensual.
Vale mencionar que los dirigentes sindicales pautaron con los empresarios volver a encontrar después del 15 de agosto, una vez que se conozcan los datos del Índice de Precios al Consumidor (IPC) a los fines de determinar el salario del octavo mes del año. Además, el Gobierno actualizó la estructura de costos y por lo tanto aumentará los montos de subsidios otorgados.
Fallo a favor de la UTA en plena maniobra del Grupo DOTA
Por otra parte, cabe recordar que el pasado 9 de mayo, en pleno paro general convocado por la CGT, el Grupo DOTA forzó a sus trabajadores para no adherirse a la medida de fuerza lo que originó un conflicto judicial por parte de la UTA, a quien finalmente le dieron la razón. El fallo del juez laboral José Ignacio Ramonet ordenó que se respete el derecho a huelga.
Durante esa maniobra del Grupo empresario que maneja decenas de líneas de colectivos en el AMBA, quedó expuesto el dirigente sindical Miguel Ángel Bustinduy, líder de la agrupación Juan Manuel Palacios, que desde hace años enfrenta a Roberto Fernández con la conducción de la UTA.
La maniobra empresarial expuso a Bustinduy, referente opositor que creció y fortaleció su poder en ese grupo, el cual de alguna manera “animó” para romper con la conducción de Fernández. Los vínculos manifiestos contra el dirigente y la patronal no gustaron nada en la CGT. “Le bajaron el pulgar”, fue la contundente expresión de una fuente de Azopardo ante la consulta de Data Gremial.