Se tensa la negociación salarial entre los camioneros y las cámaras empresariales, luego que fracasara la última audiencia, donde la oferta salarial recibida por el gremio que lidera Hugo Moyano fuera peor que la anterior, lo que generó malestar. De esta forma, las distintas ramas del sindicato se comenzarán a realizar asambleas y luego una reunión para analizar los pasos a seguir, y no se descartan medidas de fuerza. Formalmente, las partes aceptaron la propuesta de Trabajo de pasar a un cuarto intermedio hasta el viernes a las 13.
El Sindicato de Camioneros pretende para esta actualización un aumento del 15 por ciento trimestral (5 por ciento para cada mes), más un bono de 650 mil pesos y un aporte extraordinario para la obra social (que ascendería a 20 mil pesos por trabajador). El gremio sostuvo su reclamo de “un incremento acorde a la inflación real para los próximos tres meses” y el ya tradicional bono de fin de año que desde el sindicato lo consideran un derecho adquirido.
En las cámaras del transporte automotor de cargas advierten que están “muy lejos de la cifra reclamada” y contra-ofertaron un 1 por ciento mensual, que está por debajo del 3 por ciento de la pauta del Ministerio de Economía para que las paritarias acompañen la inflación a la baja prevista para los próximos meses. La oferta es peor que la anterior reunión.
Debate
En la previa de la nueva reunión con los empresarios, Hugo Moyano encarará una cumbre de la Federación de Camioneros. Hasta allí llegarán los secretarios generales de todas las seccionales del país. Analizarán la situación económica y el panorama del sector. Servirá, adicionalmente, para diseñar una posible estrategia de conflicto en caso de que las charlas sigan sin prosperar.
Los conocedores de la actividad entienden que uno de los motivos que alejó a las partes fue el posicionamiento político de las autoridades de una de las tres cámaras de la actividad que, de hecho, renovará sus autoridades en las próximas horas.
El rol del secretario de Gobierno
Julio Cordero, secretario de Trabajo, se comprometió ante una nueva reunión que tuvo con Hugo Moyano a mediar para llegar un final feliz, como sucedió en las traumáticas negociaciones de abril pasado. El ex abogado de Techint sabe que el gobierno debería ayudar como sea al líder de Camioneros luego de su gesto de haber empujado a Pablo a la renuncia a la CGT cuando desautorizó su propuesta de otro paro general.
Hace quince días, Cordero recibió a Hugo Moyano y su hijo menor, Jerónimo, en Trabajo, en una reunión secreta para hablar del recambio en la CGT y, sobre todo, de las paritarias: al Gobierno le preocupa el reclamo de Camioneros de lograr una mejora del 5 por ciento mensual por un trimestre. Gracias a la gestión de Cordero, el líder sindical aceptó renegociar el convenio salarial con cifras acordes a la pauta oficial y así pudo ser homologado. A partir de entonces, Hugo Moyano tuvo gestos significativos hacia el secretario de Trabajo.