Luego de las amenazas de medidas de fuerza, la dirigencia de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) anunció un acuerdo con el grupo Techint, dirigido por Paolo Rocca, para recomponer los salarios para los trabajadores de sus plantas siderúrgicas Ternium y Tenaris, que hasta el momento se negaban a firmar la paritaria del sector, que ya fue aceptada por otras empresas.
En medio de las intensas semanas de negociación, hubo momentos de tensión, lo que generó malestar en el sector. El anuncio del acuerdo se dio en momento que la UOM se encontraba en una reunión de secretarios generales para definir el camino a seguir luego de que las distintas reuniones con el grupo y sus plantas fracasarán.
La última propuesta puesta sobre la mesa por el sindicato y aceptada por las empresas, buscaba modificar la implementación del porcentaje acordado en la paritaria del sector que contemplaba aumentos del 42,5 por ciento entre julio y septiembre (20 por ciento en julio, 9 por ciento en agosto y 9 por ciento en septiembre, totalizando un 88,5 por ciento más el pago del bono por el Día del Trabajador y la Trabajadora Metalúrgica, en valor de 60 mil pesos.
Detalles
Con la propuesta aceptada, el incremento acordado será del 12,2 por ciento al mes de julio, del 12 por ciento para el mes de agosto y otro 12 por ciento para el mes de septiembre, más el pago de una suma de 50 mil pesos a liquidar el 6 de septiembre y 10 mil pesos a final del mismo mes.
El Secretario General del Sindicato, Abel Furlán, quien llegó a tener reuniones con Rocca para destrabar el conflicto, había sido facultado por un Congreso de Delegados para tomar medidas de acción directa si la negociación no llegaba a buen puerto.
La actividad siderúrgica cuenta con unos 15 mil obreros de las plantas de Techint en Haedo, Ensenada, Canning, Florencio Varela, San Nicolás y Campana; de Acindar en Villa Constitución, Rosario, San Nicolás, Villa Mercedes y La Matanza; entre otras.
Diálogo
Antes de este acuerdo, Furlán se mostró dispuesto a seguir con el diálogo. “Esperamos poder resolver esta negociación sin tener que recurrir a un plan de lucha, que no es el camino más deseamos los trabajadores”, dijo, aunque advirtió que "eso no significa que nosotros estemos pensando en flexibilizar nuestra petición, sino que la ratificamos en todos sus términos por el contexto económico que estamos atravesando".
Al momento de explicar por qué el grupo empresarial no está dispuesto a firmar la paritaria, el metalúrgico, enfatizó: "No es un problema de plata; acá hay otras motivaciones que no terminamos de entender; pareciera que creen que tenemos que naturalizar salarios de hambre dentro de la industria siderúrgica y ante eso nosotros vamos a mostrar rebeldía".