El Sindicato Obrero del Caucho, Anexos y Afines (SOCAYA) se declaró en las últimas horas en estado de “alerta y movilización” tras considerar insuficiente la propuesta paritaria de la Federación Argentina de la Industria del Caucho (FAIC), durante una reunión en la Secretaría de Trabajo.
De esta forma, desde el gremio que lidera por José Pasotti indicaron que realizarán “visitas directas a las fábricas para dialogar con cada trabajador y trabajadora, llevando nuestro mensaje de unidad y organización”, de acuerdo a la información difundida por el sindicato.
En la reunión, la propuesta de la FAIC consistió en ajustar los salarios según la inflación actual, acorde al Índice de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC. Así, fue rechazada por SOCAYA, ya que no considera en el incremento la brecha ya existente entre los salarios de los trabajadores caucheros y la canasta básica.
“Aún cuando expusimos la situación de compañeros que se encuentran por debajo del costo de la canasta básica, la Federación nos presentó una propuesta insuficiente que rechazamos categóricamente”, indicó Pasotti. Además, el representante gremial afirmo que “no vamos a ceder en la defensa de los salarios de nuestros trabajadores y nos reservamos las acciones necesarias para llevar adelante esa lucha”.
Asimismo, desde SOCAYA agregaron que a partir de la "mala fe frente a la negociación" de la FAIC se consideran en "libertad de acción". En ese sentido, indicaron que no convalidarán suspensiones ni procedimientos hasta tanto la Federación no reconsidere su posición.
La próxima reunión, convocada por la Secretaría de Trabajo, será el 18 de junio a partir de las 11. Hasta esa fecha se sucederán las reuniones en los puestos de trabajo, confirmaron.
El acuerdo anterior
En abril, el sindicato que conduce Pasotti había logrado un aumento del 15% para marzo para los trabajadores de la industria del caucho.
De esa manera, se logró que el salario mínimo garantizado para los trabajadores englobados dentro del convenio alcanzará los $ 500.426.
Por otro lado, el premio a la asistencia pasará de $ 65.934 a $ 75.824. A su vez, la suba alcanza a la bonificación de antigüedad que aumenta cada cinco años de trabajo. Finalmente, el adicional por fallecimiento del obrero crecerá a $ 373.127 y en caso de cónyuge, hijos, hermanos, padres y padres políticos, a $ 223.662.
En mayo empezó la tensión
Cuando se cerró el acuerdo anterior, el gremio y la cámara del sector también habían acordado volverse a reunir para renegociar una vez que se hubiese publicado el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo por parte del Indec, cifra que este estuvo disponible desde mediados de abril, pero desde ese entonces el sector patronal empezó a incumplir lo pactado y trató de dilatar el encuentro paritario.
La tensión llegó a tal punto, que el SOCAYA pidió la intervención de la cartera laboral para que los empresarios de una vez por todas se sentaran en la mesa de negociación.
En ese sentido, el 21 de mayo el gremio informó en sus redes: “Informamos que solicitamos una audiencia urgente a la Secretaría de Trabajo debido a la falta de interés y compromiso de la FAIC para lograr un acuerdo salarial para los meses de abril y mayo”.
Y completaron: “En caso de no poder firmar el incremento salarial que nos corresponde tomaremos las medidas que sean necesarias. Entendemos la situación del país pero nuestra prioridad es nuestra gente, por lo que vamos a luchar para lograr lo mejor para todos los caucheros”.
Después de estirar la situación otros 10 días, finalmente la parte empresaria accedió a reunirse y realizó el ofrecimiento que el SOCAYA consideró insuficiente y además acusó a la cámara patronal de actuar de “mala fe”.
Por su parte, la cartera laboral instó a las partes a seguir negociando en privado hasta la próxima audicencia del 18 de junio, para ver si finalmente se llega a un acuerdo.