De manera sorpresiva, y sin previo aviso, el gobierno de la provincia de Buenos Aires llamó este jueves a reanudar la discusión salarial con todo el arco sindical, luego de haber recibido los reclamos para que se mejoraran los aumentos acordados en febrero pasado. Apurado por los tiempos administrativos, los funcionarios de la gestión de Axel Kicillof tuvieron una maratónica jornada, donde le ofrecieron a estatales, docentes, médicos y judiciales el mismo esquema: adelantar cuotas y revisar antes el impacto de la inflación.
Las reuniones con los distintos gremios tuvieron la misma dinámica, y hubo pocas posibilidades de negociar, ya que se trató de un “aumento unilateral”, algo que ya se había dado el año pasado.
Si bien la mayoría aceptó la propuesta, en algunos casos como ATE la discusión generó alguna tensión interna, lo que todavía no formalizó la aceptación. En otros sectores, se dejó constancia de otros muchos recamos, y una advertencia: con la actual inflación la suba “es un parche”.
La reunión de la paritaria de los estatales inauguró un “súper jueves” donde casi todos los estatales de la provincia de Buenos Aires recibieron la oferta para reordenar el incremento salarial de este año.
El ofrecimiento básicamente fue el siguiente: adelantar la cuota del 14 por ciento de julio a este mes, para completar un 40 por ciento para el primer cuatrimestre de este año. En febrero del 2023 se había firmado una suba escalonada de un 20 por ciento en marzo, 6 por ciento en mayo y 14 por ciento en julio. En el primer trimestre del año, la inflación oficial de INDEC alcanzó el 21,7 por ciento, lo que generó que se adelante la primera revisión la semana pasada, donde no hubo ofrecimiento.
En este segundo encuentro, e gobierno provincial ofreció ese esquema, que hoy configura la nueva paritaria. Según puso saber Data Gremial, el apuro por la respuesta apunta que este viernes “cierran las liquidaciones de los salarios”, y la idea es hacerlo con los nuevos incrementos.
Según la información, los gremios estatales de la ley 10.430 acordaron en su mayoría el nuevo esquema. Por lo menos así lo hicieron desde UPCN y por la Federación de Gremios Estatales y Particulares (FEGEPPBA).
En tanto, ATE Buenos Aires decidió poner en consideración la propuesta, aunque de manera informal la dirigencia deslizó que la oferta se aceptará. Pero este mecanismo, que debe ser considerado en la CDP (comisión directiva provincial), abrió la queja interna, e incluso en algunas seccionales se rechazó la propuesta. el más notable es el de Lomas de Zamora, donde la asamblea consideró “insuficiente” el incremento.
“Las asambleas de base aprobaron por un salario igual a la canasta familiar e indexación mensual e inmediata por inflación”, le dijeron a Data Gremial desde esa seccional del sur del gran Buenos Aires. Otro distrito que desaprobó el aumento fue Almirante Brown (que abarca además las comunas vecinas de Presidente Perón y San Vicente).
Parche
Si bien a la salida de los tres encuentros se confirmó que se aceptaron las propuestas, hubo algunas voces críticas, por lo sorpresivo del llamado y por la modalidad de discusión, que en realidad fue una “oferta unilateral”. “Llamaron sin aviso ni cita previa, armaron un anuncio unilateral por parte del gobierno de adelantar las cuotas ya pactadas”, se quejó Guillermo Pacagnini, secretario general de CICOP, el gremio médico, que participó de la paritaria de la ley 10.430. En diálogo con Data Gremial, el dirigente recordó que “hicieron un gran paquete como el año pasado, sin consultar ni permitir negociar”.
En la mayoría de los casos, la dirigencia hizo notar esta situación, pero llevaron la decisión de aceptar para que en mayo se pague una suba importante, y se intente frenar la pérdida salarial. Pese a esto, para Pacagnini esta estrategia “es un parche”.
“Es evidente que con el espiral inflacionario, que según están calculando las principales consultaras sólo en alimentos puede terminar cerca del 200 por ciento anual paran alimentos, va a ser insuficiente, el aumento viene a emparchar lo que está pasando. Es una cosa tremenda”, recalcó. La mayoría de los gremios insistió con esta idea: que más allá de los porcentajes, hay que frenar la inflación.
Otros reclamos
Si bien lo salarial fue protagonista casi exclusivo de los encuentros de la semana pasado y los de esta, los distintos sindicatos tenían una serie de cuestiones para agregar, que dejaron constancia en las distintas actas.
En el caso de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB), la delegación que encabezó el secretario general Hugo Russo ratificó en la mesa de negociación “los reclamos de activación de las mesas técnicas de, como la Ley Marco de paritarias, restitución del 3 por ciento de antigüedad, peritos y salarios de las categorías más bajas del escalafón”.
Además, se confirmó que la reapertura de la discusión será el próximo mes, cuando se complete el primer semestre del año. Además, habrá un aumento del 40 por ciento para las asignaciones familiares. Uno de los pedidos realizados la semana pasada no fue atendido.
Se trata de una iniciativa del Frente de Unidad Docente Bonaerense, cuyos gremios exigieron incrementar en retroactivo la suma acordada para marzo en un 5 por ciento, es decir, llegar a 23 por ciento para ese mes para alcanzar el 45 por ciento en mayo y agregar un 20 por ciento más para julio.