Si bien la CGT salió a respaldar al Gobierno en medio de la corrida cambiaria que pone en jaque a la economía, también mantiene fuertes reclamos hacia el oficialismo, como por ejemplo la histórica deuda de las obras sociales y la falta de actualización de la legislación en la materia.
Lo cierto es que el pasado martes el triunviro cetegista Héctor Daer recibió en el Salón Felipe Vallese de la sede gremial a la ministra Kelly Olmos (Trabajo) y al ministro Tristán Bauer (Cultura) para un evento pero aprovechó la oportunidad para transmitirles que desde “la CGT vamos a defender los derechos de los argentinos. Somos parte de este gobierno nacional y popular y responsables de conducir al movimiento obrero” al tiempo que cuestionó a los “especuladores” que estarían detrás del tembladeral financiero.
En este sentido, les pidió a los funcionarios que le transmitan este mensaje al trípode sobre el que se asienta el Frente de Todos: Cristina Kirchner, Alberto Fernández y Sergio Massa.
Apoyo pero con quejas
Pero más allá de este respaldo institucional de uno de los integrantes de la conducción de la central de calle Azopardo, en la reunión de consejo directivo del pasado jueves se escucharon varias quejas hacia los funcionarios del Ejecutivo.
En aquella tarde hubo reproches por la ineficacia de las medidas para contener a una inflación récord pero también por la falta de respuesta a cuestiones particulares de las propias entidades gremiales.
Uno de los planteos más apoyados por el nutrido grupo de jefes sindicales presentes fue el de la deuda que mantiene la Superintendencia de Servicios de Salud con las obras sociales. “Hubo coincidencia de todos”, confió uno de los presentes.
Además de la millonaria deuda, hubo quejas porque el Gobierno no modifica el tope de aportes para empleados en relación de dependencia, que estaría en los $600 mil, generando también una pérdida de recursos vía recaudación.
El gran problema es que hoy los dirigentes gremiales no tienen “respuesta” en estos planteos por parte de los funcionarios del Ejecutivo.
También se hizo notar el malestar por los bajos salarios de algunos rubros y, en este sentido, se le reclamó al estado garantizar que, por ejemplo, los empleados municipales alcancen un sueldo mínimo de $140 mil.
Más reclamos y el acto que se viene
Asimismo, hubo reproches a las autoridades del PJ Nacional por la escasa participación de los dirigentes gremiales en el organigrama del partido y pidieron mayor apertura a la cúpula de la coalición oficial en la negociación de las listas para ocupar bancas en las distintas legislaturas. En el Consejo del PJ del último viernes sólo estuvieron Daer y Andrés Rodríguez, secretario adjunto de la central sindical.
Es probable que este planteo nuevamente emerja durante el acto por el Día del Trabajador que la CGT organiza para el martes 2 de mayo, desde las 14, en el estadio de Defensores de Belgrano.
La convocatoria al encuentro lleva el mismo nombre del documento aprobado en el reciente consejo directivo, “Estamos a tiempo”, en el que la institución hace un llamado a toda la clase política a llegar “a un consenso” que permita sortear la grave crisis que atraviesa el país.