El presidente Alberto Fernández aseguró este viernes que "el poder no pasa por quién tiene la lapicera" sino por "quién tiene la capacidad de convencer", en una referencia a la recomendación que le diera la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner hace casi un mes.
El primer mandatario encabezó el acto que se realizará en la Confederación General del Trabajo (CGT) en homenaje a Juan Domingo Perón por el 48° aniversario de su muerte, a donde llegaron personalidades como Hugo Moyano, secretario general del sindicato Camioneros; Santiago Cafiero, canciller; Aníbal Fernández, ministro de Seguridad nacional; y Emilio Pérsico, dirigente del Movimiento Evita, entre otros tantos más.
“El poder no pasa por ver quién tiene la lapicera, el poder pasa por ver quién tiene la capacidad de convencer. Convencer es una tarea mucho más ardua, pero es más segura”, afirmó.
De esta manera, el presidente hizo alusión a Fernández de Kirchner, quien en un acto con motivo de los 100 años de la petrolera estatal YPF le pidió que usara "la lapicera con los que tienen que darle cosas al país" y se enfrente con ellos.
“Perón convenció a millones de argentinos que hasta el día de hoy lo sienten vivo, nunca necesitó de una lapicera. Me parece que tenemos que recordar todas esas enseñanzas que fueron importantes”, sostuvo el presidente en la CGT.
Previamente, y para contextualizar su afirmación, el jefe de Estado recordó que Perón al retornar al poder en 1973 direccionó hacia la unificación de las diferencias entre las distintas ideologías porque "se dio cuenta que había que terminar con las divisiones que aniquilaban la Argentina".
Con esa nueva modalidad de Gobierno, el difunto presidente "estaba dejando el mensaje de unidad que hacía falta”, consideró Fernández. Sabía que debía "acomodarse en cada circunstancia" para aplicar sus valores y convicciones "porque el mundo es dinámico, no es estático".
Fernández habló sobre los planes sociales
En otro pasaje de su discurso en el salón Felipe Vallese, el jefe de Estado enfocó hacia los movimientos sociales, fuertemente criticados por la vicepresidenta hace una semana en un acto de la CTA en Avellaneda.
“Cuando digo primero los últimos, digo primero la gente, la producción, apoyar al que invierte y no especula, al que da trabajo, al que está en situación de pobreza, reconocer que hay una economía naciente, no conocida hasta el tiempo de hoy, que es la economía popular, y que tenemos que darle vida porque si no la vamos a dejar al margen”, indicó.
Y añadió: “Esta no es una discusión de planes sociales, es una realidad, es un mundo que así como vivió la revolución industrial, que trajo muchas crisis, la revolución digital está trayendo nuevas crisis, y nosotros tenemos que atenderlas. Y el modo de atenderlas no es desamparando a los que esa revolución está dejando al margen. Y abrazarlos es reconocerlos como actores de la sociedad que son”.
El presidente elogió las políticas de Perón
Fernández destinó gran parte de su discurso a destacar las transformaciones sociales, políticas y económicas que generó Perón en sus mandatos y aseguró que "provocó un antes y un después" en la sociedad argentina.
La aparición del máximo líder que tuvo el Partido Justicialista provocó que el país sea "distinto" en América Latina al punto que ya sea "lógico hoy en día" la "sindicalización" de los trabajadores, "el trabajo formal, gozar de licencia y jubilarse", señaló el mandatario.
"Perón fue un antes y un después" para la sociedad debido a que desde que ocupó Secretaría de Trabajo y Previsión en 1943 "entendió que había una parte de la sociedad que estaba al margen, que estaba sin derechos y no disfrutaba de la Argentina".