La Cámara Federal de Casación confirmó el procesamiento del ex gerente de producción de la filial argentina de la automotriz Mercedes Benz Juan Tasselkraut por “privación ilegal de la libertad doblemente agravada” de trabajadores de la empresa durante la última dictadura.
“La persecución gremial y la eliminación de los derechos laborales procuró dinamitar el proceso de industrialización nacional con consecuencias persistentes que se proyectan hasta la actualidad", sostuvo el fallo de mayoría que ratificó el procesamiento.
La acusación contra ex gerente de Mercedes Benz
Tasselkraut defendido por el ex juez del juicio a las juntas Jorge Valerga Aráoz, está procesado como “partícipe necesario de los delitos de privación ilegal de la libertad doblemente agravada por haberse cometido por abuso funcional, valiéndose de violencia o amenazas y por haber durado más de un mes”.
Se trata de los casos de Héctor Aníbal Ratto y Diego Eustaquio Núñez, dos de los 18 trabajadores de Mercedes Benz secuestrados, de los cuales 15 permanecen aún desaparecidos.
Los jueces Alejandro Slokar y Ángela Ledesma se inclinaron por la confirmación del procesamiento, en tanto que el tercer integrante el tribunal, Guillermo Yacobucci, votó en disidencia.
Durante el juicio a los comandantes, en 1985, las víctimas describieron que directivos de Mercedes Benz aportaron datos y facilitaron las detenciones ilegales, muchas ocurridas dentro de la fábrica.
El fallo menciona al documental “Milagros no hay. Los desaparecidos de Mercedes-Benz”, en el que Tasselkraut declaró en los denominados “Juicios por la Verdad” –en 2001, antes de la reapertura de los procesos penales por violaciones a los derechos humanos durante el régimen- que existía un conflicto laboral con la comisión interna.
En ese contexto, afirmó: “Después de un tiempo prudencial, no volvieron a suceder esas cosas. O sea, milagros no hay”.
“Entre los propósitos básicos del golpe de estado se procuró dinamitar el proceso de industrialización nacional, para lo que se trató de reprimir y hasta aniquilar a dirigentes para el indispensable disciplinamiento del movimiento obrero, de modo de reestructurar las bases económicas, políticas y sociales de un relativo estado de bienestar en el país, con consecuencias persistentes que se proyectaron en posteriores crisis reeditadas”, sostuvo el juez Slokar en su voto.
Según la recopilación de los hechos, el 12 de agosto de 1977, el obrero Héctor Ratto fue convocado a la oficina del gerente de Producción, Juan Tasselkraut, donde fue retenido y más tarde ese mismo día fue secuestrado.
En esa ocasión, Ratto escuchó a Tasselkraut revelar a la policía la dirección del delegado Diego Núñez, quien fue secuestrado al día siguiente.
Al día siguiente fueron trasladados al centro de detención de Campo de Mayo junto a otros compañeros de la fábrica; todos fueron torturados, Ratto recuperó la libertad pero Núñez y los otros delegados continúan desaparecidos.
Mercedes Benz, que se encontraba entre las veinte empresas de mayor facturación y era uno de los principales complejos industriales del país, tenía como principal cliente al Ejército Argentino, que compraba los camiones Unimog.
Tasselkraut había sido sobreseído en abril de 2022, pero la Cámara Federal de San Martín revocó esa decisión y dispuso su procesamiento, confirmado ahora por el máximo tribunal penal del país.