Luego de un nuevo fracaso para darle el visto bueno a una serie de proyectos que reforman el funcionamiento de los gremios, la UCR apunta a una nueva estrategia para tratar de darle tratamiento parlamentario este año. legisladores del radicalismo presentaron una fundamentación legal para insistir con la votación del proyecto en la cámara Diputados la próxima semana. La iniciativa de “democracia sindical”, como la vende el bloque, chocó primero con la falta de apoyo del oficialismo libertario, y luego con una jugada del bloque que lidera Miguel Ángel Pichetto.
Según se informó, en la pasada reunión de la Comisión de Legislación del Trabajo, el proyecto impulsado por la UCR y el PRO obtuvo 15 firmas y no llegó al dictamen. Eso no fue motivo para que Martín Tetaz (UCR), titular de la comisión, insista con el nuevo pedido. La iniciativa pretende la eliminación de las reelecciones indefinidas para los secretarios generales, la supresión de la obligatoriedad de la cuota solidaria y la puesta en vigencia de la ficha limpia para los sindicalistas. Asimismo, se propone la reglamentación de órgano de cinco miembros en las dirigencias de los sindicatos con representación de las minorías y se establecían nuevos esquemas de elección de la obra social sindical.
La interpretación que realiza Tetaz se remonta a una votación de 21 de abril del 2010, que señala que “para que un despacho sea válido es necesaria la firma de la mayoría de los miembros de cada una de las comisiones”. En ese marco, analiza que "es ajustado a Derecho que el cuerpo no puede cambiar el reglamento sin que exista un dictamen previo de la comisión correspondiente o en todo caso hubiera necesitado una mayoría especial" y concluye: "Considerando que esa resolución interpretativa fue aprobada con 141 votos positivos vs 91 votos negativos [...] no puede de ninguna manera corregir el reglamento hacia delante".
Decide Menem
La solicitud, que busca sesionar el próximo martes 26 de noviembre (elección que implicaría cruzarse con otro pedido de convocatoria, de sus pares radicales del bloque Democracia para Siempre), quedó en manos del titular de la cámara de Diputados, Martín Menem. Más allá de que su decisión sentaría un precedente que reformaría la interpretación de la práctica legislativa, resulta pertinente remarcar que La Libertad Avanza tampoco acompañó en su totalidad al dictamen de la UCR.
Otra particularidad es que en la última reunión de la Comisión de Legislación Laboral sí obtuvo dictamen de mayoría el proyecto de la UCR y el PRO de reforma de los créditos laborales, que establece una tasa de interés pura del 3 por ciento anual para las indemnizaciones mientras transcurre el tiempo del litigio judicial. Sin embargo, esa propuesta no fue incluida en el temario.
Obstáculos
En un principio existían consensos sobrados para la aprobación del dictamen, pero la cercanía entre la CGT y Casa Rosada hicieron caer el proyecto en el mes de septiembre, cuando los representantes de La Libertad Avanza desistieron de apoyar al radicalismo. Sin embargo, volvieron a conseguir los respaldos para esta nueva reunión. Necesitaban 16 de las 31 firmas, pero una baja de último momento les quitó un apoyo clave: la cordobesa Alejandra Torres (Encuentro Federal) le cedió su lugar en la comisión al jefe de su bloque, Miguel Pichetto, quien tiene mayor sintonía con los referentes sindicales.
"Vengo a manifestar mi rechazo al planteo", inició Pichetto, quien luego de enumerar reformas laborales ya aprobadas en ley Bases dijo: "Me parece que no alcanza con un debate meramente parlamentario, es imprescindible llamar a los representantes de las organizaciones sindicales porque hay algunas experiencias que han sido muy frustrantes en la historia argentina a la hora de abordar estas temáticas". "Hay que ser realistas de los límites que el Gobierno tiene y el mismo Gobierno no entendió", concluyó y confirmó que los redactores del dictamen se anclarían en 15 firmas.
Más adelante, y con cierta sorna, un representante del gremialismo, el santiagueño José Gómez (Unión por la Patria), le dio un susto al peronismo: "Me van a disculpar mis compañeros, pero yo voy a apoyar la decisión radical de no reelección en los sindicatos... pero siempre y cuando nosotros, en la cámara de Diputados, pongamos una cláusula de que no podemos ser reelecto". "Esto es legislar en cuestiones que no nos corresponde. El pueblo tiene el poder del voto y el afiliado tiene el poder del voto", concluyó.