El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires apuesta a eliminar la reincidencia en las cárceles con un nuevo programa laboral para presos. Si bien la propuesta original había sido elaborada en 2022, durante la mañana del miércoles el Ministerio de Justicia bonaerense aprobó el nuevo proyecto llamado Programa Buenos Aires por la Reducción de la Reincidencia.
El documento, publicado en el Boletín Oficial bonaerense de este miércoles, resalta la "finalidad esencial" del régimen penitenciario: la "readaptación social de los penados". La idea es fomentar la inserción laboral o el desarrollo productivo de las personas privadas de su libertad, en cárceles o en otros regímenes.
Las estadísticas oficiales son claras: tras un aumento sostenido de los niveles de encarcelamiento, Argentina llegó a las 125.041 personas privadas de su libertad en 2023. De ese total, cerca de la mitad está a cargo del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB).
Además, el crecimiento de la población carcelaria mostró una particular aceleración en las últimas décadas. Entre los años 2000 y 2022, la provincia de Buenos Aires registró una suba del 93 por ciento en su tasa de encarcelamiento. Según la Comisión Provincial por la Memoria, para principios de 2024 alcanzó las 57.550 personas detenidas.
En ese sentido, otro dato significativo es que se estima que la tasa de reincidencia rondó el 29 por ciento en los últimos 15 años, lo que implica que una de cada tres personas privadas de su libertad ya había estado detenida antes. Tomando la cifra de 57,5 mil presos en el SPB, unos 16,6 mil serían reincidentes.
Qué dice la ley
El proyecto apunta a disminuir la reincidencia carcelaria de quienes salen en libertad a partir de su inclusión en polos productivos de la economía popular.
En esta línea, manifestaron "se encuentran comprendidas tanto las personas que hubieran sido encarceladas de manera preventiva como aquellas que fueron condenadas. Asimismo, alcanza a las y los adolescentes que hayan sido sujetos a medidas privativas o restrictivas de la libertad en el marco de un proceso penal".
La iniciativa propone, por un lado, el acceso al trabajo de los liberados mediante la creación de “Polos Productivos de Inclusión”: espacios de trabajo para personas con antecedentes penales organizados en función de una actividad productiva de la economía popular. Por otro lado, educación técnica y profesional dentro de las cárceles, para promover el acompañamiento en el último período antes de recuperar la libertad.
Según el informe "Reincidencia en Argentina" elaborado por el Centro de Estudios Latinoamericanos sobre Inseguridad y Violencia de la Universidad de Tres de Febrero, en Argentina aproximadamente 20.000 personas recuperan la libertad por año. Se estima que el 41% de las personas privadas de libertad estuvieron en la cárcel previamente, y la mitad de los reincidentes estuvieron menos de un año en el medio libre antes de ser detenidos nuevamente.