La marcha del Día del Trabajador, el objetivo inmediato de la CGT en su pelea con el gobierno

La dirigencia de central ya trabaja en la organización de la jornada del 1° de mayo, la próxima escala del plan de lucha lanzado contra las políticas libertarias. Con qué otros sectores sumarán esfuerzos.  

Lunes, 14 de abril de 2025 12:53

Luego de considerar “un éxito rotundo” el paro general de la semana pasada, la conducción de la CGT ya piensa en la marcha del 1° de mayo, la próxima estación en el plan de lucha lanzado contra las políticas libertarias. En conferencia de prensa, Héctor Daer adelantó que mañana martes se reunirá el Consejo Directivo de la entidad para planificar y organizar la jornada del 1° de mayo a través de la cual continúa el plan de acción decidido el 20 de marzo.

El dirigente muy vinculado a las regionales de la CGT del interior del país confió que “muchos ya están tirando un paro de 36 horas. No hay que apurarse. A nosotros, como decía Juan Domingo Perón, nos conviene esperar. El trabajo lo están haciendo ellos que pierden credibilidad y apoyo”.

El Consejo Directivo podría decidir una nueva fecha de movilización o un nuevo paro haciendo del 1° de mayo un peldaño más en una serie de medidas escalonadas, aunque el sector “dialoguista” y más moderado de la CGT podría posicionarse en favor de abrir una  ventana de negociación con el gobierno en los próximos 20 días y darle la oportunidad de ofrecer respuesta a alguna de las reivindicaciones planteadas sin que sea necesario “levantar” el acto que, de hecho, se desarrollará en todo el globo.

Miradas diversas

Uno de los dirigentes de peso en el Consejo Directivo, el titular de La Fraternidad, Omar Maturano, ya había formulado la idea de que el paro del 10 de abril serviría como un “desahogo” para los trabajadores y, por lo tanto, era una acción aislada. Un concepto contrario a la decisión de profundizar el plan de lucha.

Por su parte, Omar Plaini, dirigente canillita, señaló que “hay que ver qué hace el gobierno. Está en ellos entender la interpelación que se le ha hecho desde el sector asalariado, los jubilados, los trabajadores informales y las pymes”. Para el dirigente, “ya instalamos en la sociedad el debate sobre que el camino que lleva el gobierno es sin retorno. El proceso socioeconómico se deteriora a pasos agigantados. El gobierno está en las puertas de una devaluación que se jactaba que no iba a suceder. Todo sube menos el salario”.

Para Plaini, “el que tiene que dar una respuesta es el gobierno y también los sectores de la oposición política. Sobre todo aquellos que vienen del campo nacional y popular. Los cambios tienen que venir desde la política”.

La postura de las CTA

Por su parte, las dos fracciones de la CTA se encuentran en un proceso de reunificación y definieron una coordinación que ya lleva varios meses. El martes, los secretarios generales Hugo Godoy y Hugo Yasky viajarán juntos a Salta para participar de un congreso en común en el que fijarán la posición de profundizar el plan de lucha. Godoy señaló que “la decisión de nuestras dos CTA es darle continuidad y profundidad al plan de lucha. Vamos a Salta porque entendemos que el plan hay que federalizarlo y generalizarlo en todo el país”. A la vez, señaló que buscarán “preparar nuevas medidas en el transcurso del mes de abril y mayo que fortalezcan mayores niveles de unidad”.

El dirigente lamentó la actitud de Andrés Rodríguez, titular del gremio de estatales UPCN, que acordó un incremento salarial de solo el 1,3 por ciento mensual hasta junio: “En algunos sectores de la dirigencia sindical hay mucha incoherencia. El paro nos debería dar fuerza para discutir mejoras y no retrocesos salariales. Más allá de las situaciones aisladas, es necesario incrementar el nivel de lucha. Vamos a compartir la propuesta de profundizar la lucha con los dirigentes de la CGT que estén dispuestos a recoger el mandato que dieron los trabajadores en el paro”.