El cotitular de la CGT, Pablo Moyano, aseguró hoy que la oposición procura armar "una nueva Unión Democrática recalcitrante para intentar gobernar el país a partir de 2023 y quitar y eliminar derechos"; ratificó la necesidad de marchar el 1° de febrero a la Corte Suprema de Justicia para que "se haga justicia de verdad" y reivindicó "la importancia de la unidad total de la CGT".
"Será una suerte de nueva Unión Democrática en la que confluirán todos, desde (José Luis) Espert y (Javier) Milei hasta (Patricia) Bullrich y el resto de la derecha, que desea y apuesta a que no haya acuerdo con el FMI para que se pudra todo. El único objetivo de esa alianza es aniquilar todos los derechos de los trabajadores", aseveró en entrevista con la agencia estatal Télam.
Moyano afirmó que "la oposición política ya no disimula", señaló que "el macrismo fue lo peor que pudo pasarle al país desde 1983" y subrayó que aún "se ignora dónde fue el famoso préstamo contraído por más de 50 mil millones de dólares, porque no hizo ni una calle, y solo se trató de una rueda financiera para beneficiar a amigos y fugarlo al exterior, porque aquí no invirtió un dólar".
El secretario adjunto del gremio camionero opinó que "los mandantes de la oposición de la derecha recalcitrante son el Fondo Monetario Internacional (FMI), la embajada estadounidense, el Grupo Clarín y los grandes empresarios como Mercado Libre y Paolo Rocca, que la irán ordenando para que confluya en una gran alianza con vistas a las elecciones presidenciales de 2023".
Además, Moyano enfatizó que "el camino de la reactivación económica es muy difícil porque la oposición no permite hacer y critica y rechaza cada iniciativa, como la reciente negativa a aprobar el (proyecto de) Presupuesto nacional, lo que pudo haber generado una grave crisis institucional y económica", aunque aseguró que "el peronismo y el movimiento obrero siempre respaldarán al Gobierno".
Para el líder gremial, el peronismo retendrá el gobierno en 2023 "si hay trabajo, salarios y jubilaciones dignas" y, en ese sentido, aseveró que el movimiento obrero seguirá acompañando la gestión de Alberto Fernández, pero también marcará errores y elevará propuestas.
El dirigente camionero evaluó que, pese a los problemas heredados y la crisis sanitaria, "el Gobierno se encamina bien hacia la recuperación económica"; aseguró que "las paritarias continuarán siendo libres" porque ese fue "el compromiso del Presidente" y enfatizó que "la prioridad será siempre contener la inflación".
"Lo que le critico al Gobierno es no haber sido algo más duro para controlar la inflación. La ausencia de solidaridad del empresariado argentino en plena pandemia de coronavirus fue total. Pero si hay reactivación económica los trabajadores y quienes menos tienen recapacitarán en 2023 e impedirán que regrese el macrismo. Esa reactivación ya comenzó de a poco y se observa en rutas y autopistas", afirmó.
Y agregó: "La prioridad de la nueva CGT tendrá será acompañar cada conflicto en el país, propondrá ideas al Presidente y a los ministros de Trabajo y Economía, Claudio Moroni y Martín Guzmán, para generar empleo, y respaldará la lucha contra la inflación y el aumento de los precios, porque hay una gran falta de solidaridad de los empresarios, que solo quieren ganar y no piensan en los trabajadores.
Moyano añadió que la CGT conversa de forma permanente con los movimientos sociales cómo pasar de los planes al trabajo genuino porque "es todo un tema", y explicó que ya existen acuerdos con algunos gremios -como construcción y gastronómicos- para capacitar a ese sector a fin de que ingrese a la formalidad.
Al ser consultado respecto de los dos primeros meses de gestión de la nueva CGT, Moyano revalorizó "la unidad total lograda en Parque Norte en un momento económico y sanitario muy difícil, más allá del distanciamiento de años con algunos compañeros, lo que permitirá respaldar mejor a un Gobierno castigado de forma permanente por una oposición irresponsable a la que nada o poco le importa".
"Ese acompañamiento de los conflictos por parte de la CGT se evidenció hace algunos días con los gremios marítimos y fluviales a partir de un problema importante en la marina mercante, lo que fue planteado ante el Presidente y el ministro de Transporte, Alexis Guerrera. Ocurre que durante años se perdieron empleos por la picardía y viveza del empresariado argentino, que se va a Paraguay para abonar menos impuestos y contrata trabajadores por menos salario", explicó Moyano.
También sostuvo que, junto con los secretarios de Interior y Gremial de la central obrera, Antonio Caló (UOM) y Mario Manrique (Smata), respectivamente, desde marzo comenzará a recorrer las delegaciones regionales de todo el país para "desarrollarlas y potenciarlas y escuchar a dirigentes y trabajadores, como hizo Hugo Moyano".
El cotitular cegetista reivindicó la posibilidad de que el Congreso sancione una Ley Federal de Transporte, sostuvo que hace tiempo trabaja en ese proyecto junto con Sergio Sasia (ferroviarios), Omar Pérez (camioneros) y gremios marítimos y fluviales y añadió que "el Presidente se siente muy identificado con el tema de la marina mercante y se comprometió a un resurgimiento de esa actividad soberana".
"Lo mismo debe ocurrir con todo el transporte. Es posible compatibilizar todo y terminar con la vieja pelea entre el camión y el tren. Desde hace meses se trabaja en ese sentido con Sasia, con quien camioneros ya se complementa en los centros logísticos del país. La pelea con los ferroviarios ya se dejó de lado", concluyó.
El gremio camionero que conduce junto con Hugo Moyano percibirá la última cuota paritaria del 12,5 por ciento de este año en marzo y, el personal, está cobrando el bono de 48 mil pesos antes del inicio de las nuevas negociaciones en junio próximo.