Por unanimidad, la asamblea de SanCor aprobó el plan de un grupo empresario para rescatar la láctea

Ingresarán al fideicomiso controlado por empresarios, que también tiene el apoyo del gremio ATILRA, y que se activará cuando los inversores consigan financiamiento.
14 de enero de 2022

Durante la Asamblea Extraordinaria realizada este viernes en la sede central de SanCor, y por unanimidad, se aprobó la creación de un fideicomiso que dará pie a la creación de SanCor Capital, una iniciativa que apunta a establecer un fondo a partir del cual expandir la producción y facturación de la cooperativa y cuenta con el apoyo de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA), que conduce Héctor Ponce.

Si el grupo inversor consigue el financiamiento del gobierno, se calcula en torno a los 60 millones de dólares, pasará a controlar la láctea con base en Sunchales.

El proyecto suma a un grupo de empresarios no necesariamente vinculados con la industria lechera pero dispuestos a invertir en ella (con el respaldo financiero del Banco Nación) y cuenta con la aprobación y aval de los socios tamberos de la Cooperativa.

En la asamblea, que tuvo lugar en Sunchales, Santa Fe, estuvieron presentes los delegados de los productores y los integrantes del Consejo de Administración de SanCor. Fue clave el acompañamiento del gremio ATILRA para lograr el voto favorable de los tamberos.

La creación de SanCor Capital supone el ingreso de divisas frescas para apuntalar la producción de un pilar fundamental de la industria agroalimentaria. El contrato del fideicomiso vincula a la Cooperativa con el Grupo Inversor, que integran, entre otros, los empresarios Marcelo Figueiras, José Urtubey y Gonzalo Scaglione.

La nueva etapa se inicia bajo la conducción de un Directorio del Fideicomiso integrado por representantes de ambas partes, incluyendo un director designado por ATILRA, aunque el representante sindical no integra el fideicomiso.

Logrado ahora el voto favorable de los asociados de SanCor, el último requisito que queda para que se active es que los inversores consigan el financiamiento que la láctea necesita.

El apoyo del gremio lechero ATILRA, que lidera Héctor Ponce (foto), fue fundamental para llegar a la solución

La cooperativa actualmente tiene una deuda total entre préstamos, intereses y otros conceptos que rondaría los casi 400 millones de dólares. Además, necesita fuerte inyección de capital para recuperar posiciones en el market share lácteo ya que SanCor fue perdiendo producción y participación de mercado en las últimas décadas. Al punto que desde la última restructuración pasó de procesar más de 3,5 millones de litros diarios a un nivel de 650.000 litros por día.

Para eso, los empresarios ya vienen trabajando en gestiones con bancos públicos y privados. En el caso de las negociaciones con el gobierno, el Estado les pedía tener el entramado institucional que acaban de lograr y también presentar un plan de crecimiento alternativo (que los empresarios ya tienen diseñado) porque la confianza oficial con el actual gerenciamiento (que pese a que se desprendió de activos en los últimos 4 años no logró sanear financieramente la compañía) está agotada.

Las conversaciones por el financiamiento con el gobierno ya están iniciadas y avanzadas. El grupo está trabajando con el gobierno en dos líneas: un préstamo directo o la emisión de bonos (valores representativos de deuda). Con el visto bueno de los socios y (sobre todo) el apoyo del gremio, se espera ahora que el gobierno nacional avance en la concreción de la arquitectura financiera para el fondeo que necesita SanCor.