El Hospital Laura Bonaparte, referente en salud mental y tratamiento de adicciones en la Ciudad de Buenos Aires, enfrenta una situación crítica tras los despidos masivos impulsados por el gobierno de Javier Milei. Tras los 200 telegramas enviados a trabajadores y trabajadores de la institución, convocan a un abrazo simbólico hoy a las 17, en Combate de los Pozos 2133, en el barrio de Parque Patricios.
Este ataque al Hospital se enmarca en una política de desfinanciamiento y vaciamiento que pone en riesgo no solo a esta institución, sino a la salud pública en general. Semanas atrás frente a los 1400 despidos anunciados por el Ejecutivo, Javier Milei expresaba en su cuenta de instagram: “Seguimos con la motosierra”. A los despidos del Bonaparte, se le suman los del Hospital Sommer en General Rodríguez en donde según manifestaron ya se recibieron 150 telegramas.
“Porque vaciar es cerrar, te esperamos este Lunes 20 de enero a las 17hs en la puerta del Hospital”, expresaron desde la cuenta oficial de los trabajadores en lucha, y agregaron: “Porque SIN TRABAJADORES NO HAY SALUD MENTAL. No a los despidos.Invitamos a representantes de los hospitales y sectores en lucha por despidos, de la Secretaría de DDHH y Sitios de Memoria, organizaciones sindicales, sociales, de DDHH, políticas y de la cultura y a toda la comunidad.
El recorte iniciado por el gobierno de Milei empezó a ejecutarse cuando se anunció el recorte de más de 700 millones de pesos para el presupuesto estimado en 2025. La reducción en el monto total, según manifestaron en esa oportunidad, se justifica por la “distorsión existente entre camas ocupadas y presupuesto del hospital”, agregaron que el 78% de los fondos se destinaban al pago de los salarios.
Días atrás, entre el gobierno y representantes de UPCN llegaron a un acuerdo de convocar a una mesa de diálogo para discutir la situación. De allí que convinieron que durante lo que el proceso dure, no habrá medidas de fuerza por parte de los trabajadores ni se enviarán telegramas al personal al que en principio no se le renovará la contratación. A pesar de esto, nada indica que por parte del gobierno se retroceda en la decisión.
“No nos oponemos a la reestructuración, pero sí al vaciamiento para despedir", expresaron desde el gremio, y agregaron: “En el Bonaparte echaron casi al 50% del personal, no nos oponemos a reordenar el funcionamiento de los organismos o la reestructuración de la que hablan las autoridades, pero no a vaciarlos con la excusa de los despidos”.
Las palabras de Kreplak
Días atrás el Ministro de Salud de la Provincia de Buenos Aires se posicionó frente a los hechos de público conocimiento y expresaba: “Esto es parte de 1400 despidos que afecta al sistema de salud, que cada día tiene más demanda. Con menos trabajadores y profesionales la situación es cada vez más difícil”.
https://www.datagremial.com/informacion-general/gobierno-y-upcn-acuerdan-mesa-de-dialogo-por-despidos-en-salud-no-nos-oponemos-a-la-reestructuracion-pero-si-al-vaciamiento-para-despedir--20251171550
Expresiones de apoyo
El domingo pasado, trabajadores y trabajadoras realizaron una jornada cultural con charlas y números artísticos como parte de las acciones de resistencia en la que exigieron la reincorporación de todos los y las trabajadoras despedidas.
Amelia Rebori, licenciada en Trabajo Social del servicio de Niñeces y Adolescencias del hospital, señaló que la situación es alarmante: “La lucha que dimos hizo que el hospital se visibilice mucho más, entonces las consultas se cuadruplicaron desde lo que era hasta después de octubre del año pasado, porque la gente nos empezó a preguntar mucho más qué es lo que hacíamos”.
Rebori también subrayó cómo el vaciamiento afecta a otras instituciones de salud pública, como los hospitales Garrahan, Posadas, Español y Sommer. “Es un ataque a la salud pública en general”, afirmó, destacando que la reducción de recursos impacta directamente en pacientes oncológicos, personas con tuberculosis y quienes viven con VIH.
También resaltó la respuesta de profesionales de la salud, pacientes y familiares para defender a la institución del primer intento de cierre por parte de La Libertad Avanza en octubre de 2024. “Logramos que el hospital no se cierre gracias al apoyo dela comunidad pero fundamentalmente por los familiares y usuarios contando de que esta es su vida, su identidad, que el hospital los alojó y acá encontraron un refugio, un hogar. Lo ponen ellos en palabras».
“Ese es el paradigma que atraviesa a todos los profesionales que trabajamos en este comunidad. Por eso la comunidad entendió que este hospital no es de los trabajadores, no es de un gobierno, este hospital es de la comunidad, y son ellos quienes lo defienden”, concluyó.