Nueva caída de la industria metalúrgica: la UOM asegura que “el proceso de destrucción sigue adelante”

En el mes de junio, la actividad el sector retrocedió 1,9 por ciento con relación a mayo y 17,3 por ciento interanual. Esto genera alarma en el gremio, que asegura que las perspectivas para lo que queda del año “son muy malas”.

La actividad industrial sigue retrocediendo en el país, y afecta a gran parte del tejido productor del país. en los meses de gestión libertaria, el modelo que se implementó para frenar la inflación golpeó de lleno al sector industrial, tanto las grandes empresas como las pymes. La construcción, de la mano de la paralización de la obra pública, es una de las grandes perdedoras del modelo. La metalúrgica, la otra gran afectada de esta realidad alarmante. En este sentido, esta semana se conoció un nuevo informe que ratifica que en mayo y junio bajó la actividad en las firmas de este sector, que si se compara a lo que pasaba en 2023 el desplome alcanza el 17,3 por ciento. Esto representan “una caída sistemática”, que si además de afectar a todos los subsectores ya está generando alarma por su impacto en la desocupación. Desde la UOM confirman los números que difundió el sector empresarial, y marcó que además de estar atentos a la evolución de la crisis creen que las perspectivas “son muy negativas” para la segunda mitad del año. esta semana, se activaron las nuevas escalas salariales, que buscan mitigar el impacto de la situación entre los trabajadores.

El reporte de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA) confirma la tendencia a la baja de la actividad del sector, que se viene profundizando en mayo y junio. A cargo de su Departamento de Estudios Económicos, el trabajo confirmó que la actividad del sector “se redujo 1,9 por ciento con relación a mayo y 17,3 por ciento interanual”. En cuanto al nivel de empleo, se observa “una disminución de -0,1 por ciento respecto al mes anterior y una caída interanual de -2,8 por ciento”.

De esta manera, analizó el reporte al que tuvo acceso Data Gremial, “durante el primer semestre del 2024 la producción disminuyó 16,7 por ciento contra el primer semestre del 2023”. Si la comparación es a diciembre del año pasado “la disminución es de 11,2 por ciento”. En tanto, la utilización de la capacidad instalada “también ha registrado una fuerte disminución ubicándose -12,2 puntos porcentuales por debajo del mismo mes del año previo y -11,2 puntos porcentuales debajo del promedio del 2023”.

El trabajo de ADIMRA indica que “hacia el interior de la industria metalúrgica, se observa nuevamente una caída sistémica en todos los subsectores que componen este entramado industrial, bajas que van desde 10 hasta 25 por ciento”. En cuanto al nivel de empleo, “se observa una disminución interanual de -2,8 por ciento”. Si comparamos contra el mes de mayo, “el empleo cayó un -0,1 por ciento registrando otra leve desaceleración con respecto a los meses anteriores”. Las empresas proveedoras de las cadenas de valor de la construcción, consumo final y automotriz son “las que han demostrado peores desempeños relativos, con caídas de hasta -30 por ciento”.

Por otro lado, “las que proveen a los sectores de petróleo, gas y minería han demostrado los mejores desempeños relativos, pero no lograron crecer con respecto al año previo”. El sector que menos ha caído durante este mes ha vuelto a ser Maquinaria Agrícola, “con algunas empresas que han comenzado a crecer luego de los muy bajos niveles de producción registrados el año previo producto de la sequía”. Sin embargo, sigue con caídas muy fuertes y acumula más de un año sin crecer de forma interanual. Por otro lado, “el sector que más ha caído durante el mes de junio ha sido el de Fundición, seguido por Otros Productos de Metal y Equipos y aparatos eléctricos”.

Alarma gremial

La crisis del sector metalúrgico se profundiza a partir de las medidas tomadas por el gobierno de Javier Milei, que generaron una fuerte recesión que tiene al área productiva como principal víctima. En junio, la UOM de La Matanza alertó sobre estos efectos en el distrito más grande de la provincia de Buenos Aires, donde hay más de 500 industrial metalúrgica. En esos días, se hablaba de unos 500 despidos en el último mes, algo que la nueva caída de la actividad seguro impactará y profundizará. “La actividad de la industria metalúrgica sigue bajando, coincidimos con estos datos difundidos”, le dijo a Data Gremial el secretario general de la seccional La Matanza de la UOM, Esteban Cabello. De esta forma, el dirigente coincidió con los datos empresariales, y marcó su alarma por la crisis que no se detiene.

La baja de los niveles de trabajo de toda la industria, en La Matanza y el país, no se frenó, al contrario, lo que vemos es que se profundiza”, alertó Cabello. En este sentido, remarcó que a nivel local “la mayoría de las fábricas están suspendiendo personal, achicando el personal o quitando algún turno, el proceso de destrucción sigue adelante, están todas las empresas iguales”. El efecto de la crisis parece afectar a pymes, que desde que asumió Milei unas 10 mil cerraron sus puertas, hasta las medianas, grandes y multinacionales. Y lo peor de todo, como remarcó Cabello, es que la perspectiva para el resto del año “no mejora nada”. “Estuvimos reunidos en este tiempo con varios directivos y dueños, y ellos mismo no ven la posibilidad que mejore, la mayoría está viendo cómo hacer para sobrellevar esta situación, que creemos que va para largo”, insistió el dirigente metalúrgico.

Salarios

En este contexto, además del peligro de perder el empleo existe preocupación por la carrera de los salarios en el sector, en medio de una paritaria compleja que se resolvió hace unas semanas, salvo en el área siderúrgica, que sigue en disputa. En este punto, esta semana la UOM dio a conocer la escala salarial para el mes de julio 2024, la cual incorpora el aumento salarial establecido en el último acuerdo. El último acuerdo estableció un aumento salarial en tres tramos acumulativos: abril 7,5 por ciento; mayo 3,6 por ciento; junio 3,6 por ciento. Además, el acuerdo indicaba que, a partir del 1° de julio de 2024, se integrarían al salario básico con el correspondiente ajuste bruto para que los trabajadores reciban un salario neto equivalente al percibido en el mes de junio de 2024.

En tanto, tras la amenaza de un paro por tiempo indeterminado que iba a comenzar el lunes pasado en la planta de Acindar de Villa Constitución, la UOM anunció que se llegó a un acuerdo salarial, que permitió levantar las medidas de fuerza. Las negociaciones en el sector de la siderurgia vienen complicadas desde hace varios meses, pero el conflicto además se disparó por el anuncio de unas 100 cesantías. Después de una serie de reuniones con representantes de la compañía, que se aceleraron el fin de semana, la seccional Villa Constitución de la UOM informó que se acordó que "se estará blanqueando, en concepto no remunerativo a fin de mes (en el recibo de julio) con un ítem a cuenta futura paritaria, un 107 por ciento neto de incremento".