La Asociación Personal Jerárquico de Bancos Oficiales (APJBO) volvió a rechazar cualquier cambio en el Banco Nación, que el gobierno nacional intenta privatizar o permitir el ingreso de capitales privados. La entidad que lidera Arturo Quiñoa se declaró en “estado de alerta” cuando comenzaron los movimientos en torno de la venta de la entidad, como pasar de ser una Sociedad del Estado a una Sociedad Anónima. “Estamos pasando momentos de incertidumbre”, aseguraron.
“Termina el 2024, y el balance para los trabajadores no es bueno, un año de pérdida de la capacidad adquisitiva de nuestros salarios, por el brutal ajuste que recayó sobre todo en los trabajadores, ya sean activos o pasivos”, aseguraron desde APJBO, a modo de balance. Para los empleados del banco, “no fue un año más, por un lado, volvió el impuesto al salario, los servicios públicos subieron por encima de nuestros salarios y además el presidente del Banco Nación insiste con la transformación del Banco de la Nación Argentina en Sociedad Anónima como instancia previa para una privatización”.
Para colmo, marcaron, “la implementación de un retiro voluntario, no hizo otra cosa que desmantelar a la Institución de los principales puestos de conducción. Es un desafío de todos estar a la altura de las circunstancias y cubrir los lugares que han quedado vacantes con la idoneidad que requiere cada puesto”.
Esfuerzo
Cabe resaltar que el conjunto de los trabajadores ha realizado un trabajo excepcional ya que el Banco Nación “cierra un año en el que ha ganado participación en el mercado y tratamos de ser lo más competitivos posibles, más allá de la necesidad imperiosa de invertir fuerte en tecnología”. “Quedó de manifiesto que los trabajadores del BNA tenemos la camiseta puesta y a pesar de quien conduzca, somos profesionales, por lo tanto, deberemos hacer lo que siempre hicimos, defender al Nación, porque como siempre decimos, los directorios pasan, pero quedamos los empleados”, destacaron.
“Sabemos que el Banco Nación debe mejorar, como lo vino haciendo en sus 133 años de historia junto a los argentinos, desde sus más de 700 sucursales, cumpliendo con su carta orgánica, que nos pone como objetivos no solo la actividad comercial, el apoyo a las pymes y a las economías regionales, sino fundamentalmente el rol social, ese que a pesar de ser el primer Banco del Sistema Financiero Argentino, nos da una característica única”, insistieron los jerárquicos.
Incertidumbre
La APJBO destacó que “estamos pasando momentos de incertidumbre, por las redes sociales nos enteramos que cierran sucursales en toda una Provincia o en una región en particular, apoyamos los reclamos del Banco ante la suba de la Tasa de Higiene y Seguridad o los Ingresos Brutos en algunos puntos del país, pero esos justos reclamos en defensa del patrimonio del BNA no deben repercutir en los destinos de los empleados y sus familias, con eso no se puede tomar decisiones a la ligera y todas las medidas necesarias para un mejor funcionamiento de la entidad, se debe dar en un marco de diálogo y de consensos, esa es la forma de construir algo que perdure”.
APJBO, “siempre apuesta al diálogo y creemos que las acciones directas son el último recurso, pero parecería que el diálogo no estaría funcionando, por eso apelamos a la unidad de todos los trabajadores del BNA para defender los 133 años de historia y seguir acompañando el desarrollo de la Nación Argentina”.