Luego que el Gobierno blanqueara la intención de promover una pauta salarial del 60%, en la mayoría de los gremios prima la cautela. Con varios referentes de la CGT en pleno receso estival, en la central obrera admiten que hubo “conversaciones informales” con el ministro Sergio Massa (Economía) pero que hoy “no hay ningún papel firmado” o mesa de discusión planificada para dar sustento a la estrategia del oficialismo para aquietar las expectativas inflacionarias en 2023.
Este jueves fue la ministra Kelly Olmos (Trabajo) la que aseguró que “el 60% de aumento salarial anual con revisión no es un acuerdo, es una política que propiciamos” y consideró que “en general la CGT apoya esto, porque hay una conciencia sobre todo más de los sectores gremiales que de los empresarios, que por su capacidad de concentración muchas veces acceden a aumentar la nominalidad y luego lo vuelcan a precios”. No obstante, reconoció que “hay reticencias” en algunos sectores del sindicalismo a sumarse a esta estrategia.
La CGT en “receso estival”
La funcionaria también admitió que es Massa el encargado de impulsar una pauta salarial que vaya en paralelo con las proyecciones de inflación del Presupuesto (60%). En los gremios reconocen que hubo algunas charlas, pero muchos jefes gremiales se encuentran de vacaciones. Salvo Héctor Daer, la mayor parte de la mesa chica cegetista ha tomado estos días de enero como receso.
Por ello, resulta evidente para algunos dirigentes que Massa planta una suerte de “globo de ensayo” para intentar regular la puja distributiva y con eso, apaciguar las expectativas inflacionarias. Insiste en el relato que la proyección oficial sobre la suba de precios es creíble y que el fenómeno irá en paulatino descenso. Sin embargo, el Indec informó la semana pasada que el IPC de diciembre dio un 5,1%, un 0,2% por arriba del registrado en noviembre pasado.
La idea de promover dos subas semestrales del 30% con una revisión antes de fin de año, con todo, no parecería impracticable para algunos gremios. “Las revisiones fueron las que permitieron recuperar algunos puntos de salario, por eso ahí estará la clave de cualquier acuerdo”, expresó una fuente gremial consultada.
El primer gremio que deberá afrontar negociaciones para la nueva paritaria será la UTA. El secretario general de la entidad, Roberto Fernández, declaró que "no tenemos problema de firmar paritarias alrededor del 60%, con cláusula de revisión. Lo estamos tratando con Transporte, con los empresarios presentes”.
La postura empresaria
Desde la cámara empresarial FATAP, en tanto, aseguraron que aún Trabajo no convocó a una audiencia formal pero que no resultaría descabellada la pauta salarial impulsada por el Ejecutivo. “Dependemos de los aportes del gobierno para pagar sueldos, por eso hay funcionarios de Transporte en las negociaciones. Hoy la recaudación por la tarifa sólo alcanza al 18% del costo operativo”, informó un vocero consultado.
A fin de mes, en tanto, se espera una reunión para "revisar" la paritaria de estatales nacionales pero, en este caso, corresponde al período del 2022-2023. Seguramente se acordará "algún ajuste" pero habrá que esperar para saber si ATE y UPCN aceptarán la pauta del 60% que tendrá vigencia desde el 1° de junio. A esa altura, por otro lado, ya se sabrá si se cumplirá o no el sendero de descenso de la inflación propalado por Economía.