La UTA alerta sobre "posibles conflictos que alteren la paz social" por la eliminación de la Red SUBE

El gremio que conduce Roberto Fernández criticó la nueva medida del Ejecutivo nacional que afectará al transporte de pasajeros en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Además, hay paro en el interior del país.

22 de agosto de 2024

En un contexto de crisis económica, política y social en el país, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) cuestionó la decisión del gobierno neoliberal de Javier Milei de eliminar los subsidios que financian el Boleto Integrado con Red SUBE, y el gremio advirtió sobre la posibilidad de "conflictos que alteren la necesaria paz social". La medida impactará en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y afectará a los trabajadores que más utilizan el transporte público.

La administración nacional confirmó que dejará de financiar desde septiembre el boleto integrado de la Red SUBE en los colectivos que circulan exclusivamente en la provincia de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Hasta ahora, el beneficio se aplicaba de forma automática en el momento del viaje solo para las tarjetas registradas, generando que el primer viaje se pague con tarifa plena, el segundo con un descuento del 50 por ciento y el tercero con 75 por ciento de rebaja.        

A través de un comunicado de prensa, el gremio que lidera Roberto Fernández alertó al Gobierno sobre el impacto de la eliminación de la Red SUBE, destacando que afectará duramente en el bolsillo de los ciudadanos. A su vez, la medida también generará conflictos que alteren la necesaria paz social, advirtió el gremio.

La quita de subsidios al transporte, anunciada por el ministro de Economía Luis Caputo provocaría un fuerte aumento en el boleto de colectivos, llegando a costar hasta $1300 en la Ciudad de Buenos Aires. Además, tendrá impacto en toda el Área Metropolitana de Buenos Aires, incluyendo al territorio bonaerense uno de los más transitados.

Responsabilidad de la Ciudad

Por su parte, el secretario de Transporte de la Nación, Franco Mogetta, señaló que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires deberá asumir las responsabilidades y los costos de las 31 líneas de colectivos que circulan exclusivamente dentro de su territorio. Esto incluye a las líneas: 4, 6, 7, 12, 23, 25, 26, 34, 39, 42, 44, 47, 50, 61, 62, 64, 65, 68, 76, 84, 90, 99, 102, 106, 107, 108, 109, 115, 118, 132 y 151.

De esta manera, desde septiembre, el Estado Nacional dejará de gastar cerca de $7 mil millones por mes.

La UTA criticó la decisión del Gobierno y advirtió que impactará en los trabajadores de menores recursos que viven en zonas más alejadas, quienes toman varios transportes para llegar desde sus casas a sus lugares de trabajo.

Paro en el Interior

Por otro lado, luego de que fracasara la reunión de este miércoles, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) ratificó “la necesidad de recomponer de manera urgente los salarios de los choferes” del sector y lanzó un cese de actividades para este jueves 22 y viernes 23. La medida de fuerza afectaría, en principio, a las provincias que aún no han logrado avanzar en acuerdos regionales. En ese sentido, se informó que en los últimos días Tucumán y Mendoza lograron cerrar sus paritarias.

El conflicto renueva la polémica por la asignación de subsidios por parte del gobierno nacional a las empresas. Desde la Federación Argentina de Transportadores de Automotor de Pasajeros (FATAP) describieron las “condiciones económicas desfavorables” para hacer frente a los aumentos solicitados por el gremio.