Tras la reactivación del debate en la Comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados sobre la reducción de la jornada laboral, el tema se discute en todos los rincones del mercado formal. Asimismo, los empresarios también evalúan modificar los horarios de sus trabajadores, aunque sin confirmación. Hasta el momento reconocen que podrían hacerlo sin poner en riesgo su negocio.
Según un estudio realizado por la consultora Bumeran, el 62 % de los especialistas en recursos humanos argentinos cree que es posible implementar una reducción de la jornada laboral. En tanto, el otro 38 % advierte que no podría hacer ningún cambio en ese sentido.
A su vez, las empresas que participaron del relevamiento fueron consultadas sobre si están dispuestas a implementar dicha modificación, y entre las que respondieron que la reducción de la jornada laboral es factible, el 52 % señaló que prefiere reducir la cantidad de horas que trabajan sus empleados cada día, mientras que el 48 % opta por reducir los días laborales a cuatro.
Vale aclarar que el estudio de la consultora entrevistó a 330 compañías de diferentes rubros y puntos geográficos del país, y según sus datos se demuestra una clara tendencia a la aceptación de que la jornada laboral reducida es viable. Además, deja en evidencia que Argentina en realidad es uno de los países de la región menos propensos al cambio.
Entre los países que participaron del estudio, sólo Ecuador mostró un índice menor en la consulta respecto a si es posible implementar una reducción de la jornada laboral (60 % respondió que sí). En segundo lugar, figuran Argentina y Panamá, con el 62 %, mientras que en Perú y Chile la cantidad de empresas que aceptaría hacer cambios en los horarios de trabajo fueron del 74% y 76% respectivamente.
¿Existe la voluntad empresarial?
Otro punto que estableció la encuesta es que la mayoría de las empresas podría reducir la jornada laboral. Sin embargo, eso no significa directamente que estén dispuestas a hacerlo.
De acuerdo al informe, sólo 7 de cada 100 compañías tiene pensado implementar una disminución de los horarios de trabajo. Las otras 93 no consideran cambios, pese a que muchas de ellas lo ven como algo técnicamente factible.
Llamativamente, el 94% de las empresas encuestadas reconoce que una jornada laboral reducida es más atractiva para los nuevos talentos, aunque, una vez más, son pocas las que están dispuestas a ofrecer ese beneficio.
¿Qué sucedería con los salarios?
Además de la cantidad de horas que deben trabajar los empleados, aparece otro tema central que son los salarios. La incógnita es si una disminución del tiempo de actividad implicaría una menor remuneración o no.
Según detalló el estudio, el 72 % de las empresas considera que es posible mantener los salarios y a su vez disminuir la jornada laboral. Si esto ocurriera, los trabajadores pasarían a tener un mayor ingreso promedio por hora.
En caso contrario, los trabajadores seguirían cobrando técnicamente lo mismo, ya que percibirían un menor ingreso, pero a la vez trabajarían menos horas.
Por su parte, el oficialismo apura el consenso de un proyecto de ley para que ingrese al Congreso lo antes posible.