En una suerte de juego extorsivo, esta mañana Aerolíneas Argentinas comunicó a los sindicatos aeronáuticos que decidió suspender las convocatorias para reuniones paritarias hasta que se levanten las medidas de fuerza que afectan directamente a pasajeros.
El mensaje fue enviado a la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), la Asociación del Personal Aeronáutico (APA) y la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), según lo informado en un comunicado de la empresa.
Después de tantas negativas, el Gobierno había accedido a negociar
La aerolínea había reanudado las negociaciones con los sindicatos el pasado jueves, después de más de dos meses sin avances por la negativa constante del Gobierno a avanzar en una recomposición salarial.
En dicha reunión, “participaron altos funcionarios del área de transporte y de la Jefatura de Gabinete junto a los secretarios generales de los gremios en conflicto”, señaló el comunicado.
El viernes siguiente, se llevaron a cabo reuniones técnicas en la sede corporativa de la compañía donde no hubo entendimiento y se programaron encuentros de seguimiento para esta semana.
La excusa para suspender las negociaciones
Sin embargo, en este contexto de reactivación de las mesas de trabajo, “el gremio APLA tomó la decisión de provocar la cancelación de cuatro vuelos internacionales de largo alcance que estaban programados para este último fin de semana”, según denunció la gestión libertaria de Aerolíneas Argentinas.
Siempre según los voceros del gobierno en la empresa, se detalló que se había mencionado expresamente la situación de esos vuelos y se habían realizado sucesivas llamadas a las máximas autoridades del gremio para enfatizar la necesidad de proteger a los pasajeros, quienes son las víctimas directas de estas acciones.
“A pesar de contar con las herramientas para evitar estas cancelaciones, desde APLA hubo una manifiesta falta de interés y de voluntad en hacer que esos vuelos se operen”, machacaron.
Hablan de “provocación”
Además, sostuvieron que “esta provocación irresponsable de las autoridades de APLA demuestra que el conflicto salarial es una excusa para las autoridades del gremio —no así para sus afiliados— para dar una batalla política personal. Y en este acto, arrastraron la posibilidad de continuar cualquier tipo de intercambio con los otros gremios, a pesar de su voluntad de seguir las conversaciones”.
Como consecuencia de la decisión de APLA, 2.178 pasajeros que planeaban viajar hacia y desde Cancún, Miami, Roma y Madrid no pudieron abordar sus vuelos y debieron ser reubicados en otros itinerarios, según la denuncia de las autoridades mileístas de Aerolíneas Argentinas.
El comunicado también destacó que “los equipos de la compañía se encuentran realizando todavía hoy un enorme esfuerzo para reacomodar a estos pasajeros en vuelos propios y de otras aerolíneas. Como parte de las acciones paliativas, la compañía tuvo que recurrir a la contratación de vuelos charter de otras empresas”.
Por último, el comunicado dejó una amenaza antisindical: “Aerolíneas Argentinas lamenta profundamente las consecuencias de esta medida del gremio APLA en los planes de viaje de nuestros pasajeros, que será denunciada ante las autoridades gubernamentales y judiciales por su naturaleza abusiva y su perjuicio económico directo para la compañía”.